Problema del agua en Nuevo León sigue latente
Conagua prevé un arranque complicado de 2024 en materia hídrica, pues en temporada invernal caerá 11% menos agua que el promedio
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Diciembre
2023
El nivel de agua con que cerrará el año el sistema de presas de Nuevo León, es una suerte de recordatorio de que el problema del agua en el estado nada más no se ha resuelto.
Y es que para el día de ayer, los tres embalses registran un llenado de casi 20% menos agua que en el año anterior, el 2022, que fue cuando estalló la falta de agua en el estado y se dieron los primeros cortes del servicio, dolorosos para la ciudadanía.
Este año, el 2023, en la misma fecha, el 18 de diciembre, las cifras de llenado de las presas son aún más bajas.
Además, según pronósticos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), en el trimestre de diciembre, enero y febrero, las lluvias estarán por debajo del promedio normal, lo cual no son buenas noticias, pues los escurrimientos serán escasos e insuficientes para recargar los embalses.
Según datos de Conagua, el 18 de diciembre del 2022, las presas La Boca, Cerro Prieto y El Cuchillo almacenaban, en conjunto, 640.40 millones de metros cúbicos (Mm³) de agua y a la misma fecha de este 2023 tienen 534.53 Mm³ que es 17% menos.
Incluso, hay casos como el de la Presa La Boca en que el nivel está 80% por debajo en comparación con el año pasado.
El pasado 11 de diciembre, El Horizonte dio a conocer que para el periodo actual diciembre, enero y febrero se esperan que caigan 49 milímetros de lluvia, lo cual es 11% menos que el mismo periodo del año 2022-2023.
Dulce Cruz Torres, meteoróloga de la Conagua en el estado, dijo que si las lluvias de meses como septiembre no fueron del todo benéficas, pues estuvieron muy por debajo de lo normal, tampoco lo serán en el cierre y arranque del año y esto se está reflejando en las presas por lo cual hay que cuidar el agua.
Empezó a llover algunos meses, no los meses que realmente nos interesaban, estas lluvias no nos han generado, ni los escurrimientos, ni los incrementos en los embalses, como sería idóneo.
Dulce Cruz Torres.
La experta dijo que para llenar las presas, se necesitan lluvias por 50 mm durante cinco días seguidos y no 49 durante tres meses.
A pesar de que pudiesen presentarse condiciones no tan severas hasta principios del siguiente del año, lo que sí necesitamos son lluvias constantes.
Dulce Cruz Torres.
Presas a detalle
A las tres presas les caben en conjunto 1,462.6 Mm³ de agua, por lo que los 640 Mm³ que tenía el año pasado eran el 44% de su capacidad y los 534.53 Mm³ que tienen actualmente son el 36% de su llenado.
De acuerdo con los reportes de la Conagua el 18 de diciembre de 2022, La Boca se encontraba en 26.16 Mm³, lo que representa un nivel de llenado de 66.3% mientras que en este 2023 tiene 5.43 Mm³, es decir, el 13% de su llenado; esto significa que La Boca bajó hasta un 80% su llenado.
En el caso de la Presa Cerro Prieto, al cierre de 2022 tenía un almacenamiento de 58.20 millones de metros cúbicos, es decir, un 19.4%, sin embargo, este 2023 cierra con 33.31 millones de metros cúbicos, el 11% de su almacenamiento.
Con este llenado actual, se encuentra un 43% por debajo de cómo estaba en diciembre de 2022.
El Cuchillo en 2022 cerró con 555.89 millones de metros cúbicos, el 49% de su almacenamiento y en 2023 está cerrando con 495.82 millones de metros cúbicos, un 44% de su llenado. Esto representa un 11% menos de agua con lo que cerró el año pasado.
Si bien las lluvias son las que pudieran dar un fuerte respiro a estos embalses, parece que estas no llegarían pronto o no en la cantidad que se requieren.
Más sedientas que el año pasado
Las tres presas de Nuevo León tienen menos agua que en el 2022, lo que profundiza la falta de agua que padece el estado
Aún y cuando el segundo acueducto de la presa El Cuchillo comience esta semana a funcionar a toda capacidad, la baja presión en los domicilios va a continuar, advirtió el director de Agua y Drenaje, Juan Ignacio Barragán.
Eso abundó el funcionario, se resentirá con más agudeza por las noches, pues las reducciones nocturnas son ''para siempre''.
Durante rueda de prensa, el titular de la paraestatal dijo que el abasto a la metrópoli no sufrirá cambios significativos hasta que no lleguen precipitaciones.
En la medida en que tengamos lluvias podemos aumentar el suministro.
Sí, se va a sentir una mejoría muy clara, pero no podemos nosotros tomar el riesgo de dar una sobre respuesta.
Juan Ignacio Barragán.
Respecto a las reducciones nocturnas, Barragán reiteró que la modulación es un programa definitivo para evitar fugas.
Necesitamos bajar la presión en el horario nocturno y eso va a continuar, yo creo, ya para siempre, porque eso es como funcionan las empresas de primer mundo.
Juan Ignacio Barragán.
Al insistírsele sobre los domicilios con problemas de abasto, o de presión, durante el día, Barragán respondió que la paraestatal debe cuidar no abatir los embalses de la entidad.
Lo que nosotros queremos es que se sienta una clara mejoría, pero tenemos que seguir cuidando la presa de La Boca y la presa Cerro Prieto.
Que más quisiéramos nosotros poder darle todo, pero tenemos que cuidar el verano. ¿Qué tal qué otra vez nos sale un verano seco.
Juan Ignacio Barragán.
Así, el funcionario reiteró que mantendrán un suministro ''conservador'', pues dijo, todavía persiste la falta de agua.
La responsabilidad de la empresa es surtir de agua a la ciudad todo el año y no cantar victoria demasiado rápido.
Tenemos que ser conservadores y de esta manera lograr un suministro estable durante todo el año.
Juan Ignacio Barragán.
Fue el sábado cuando el segundo acueducto de El Cuchillo se puso en marcha en su totalidad.
Barragán estimó que esta misma semana el popote estará suministrando a la metrópoli los 5,000 litros por segundo proyectados.
Con información de David Cázares.
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