Bebé se antepone a cáncer con trasplante en el IMSS

'Ahora es el doble de inquieta', dijo su mamá, Perla López, quien recuerda cómo a la familia se le vino el mundo encima con el diagnóstico de su pequeña Mileva.

Por: David Cázares

23
Agosto
2023

Todavía no cumplía ni un año de nacida cuando Mileva fue sometida a un trasplante de hígado por el cáncer que padecía, y con una actitud sonriente la pequeña logró sobreponerse a la enfermedad, aunque no fue un proceso sencillo.

Su mamá, Perla López, recuerda cómo a la familia se le vino el mundo encima con el diagnóstico, pero que aún y con lo pesado de los tratamientos, la bebé nunca se rindió.

Siempre fue muy alegre, a pesar de las quimioterapias siempre se mantuvo alegre y con energía, no parecía que estaba recibiendo un tratamiento tan fuerte, nunca dejó de ser hiperactiva ni dejar de comer”, compartió la mamá de la beba.

Y si el reto para la pequeña Mileva era mayúsculo, para sus padres también lo fue, pues la enfermedad trajo también problemas e incertidumbres.

“Yo tuve que renunciar al trabajo que tenía por estar en el hospital con ella, y mi esposo también faltaba mucho, eso nos repercutió muchísimo en el sentido económico, lo que nos trajo más problemas.
“Ahora ya estoy trabajando nuevamente, y ahora estoy en un trabajo mucho mejor porque me permite estar con ella, ya que solo trabajo los fines de semana”, platicó la señora Perla.

Libre del cáncer, Mileva ahora es más inquieta, traviesa, y alegre, mientras que sus papás también mejoraron su calidad de vida.

“Si antes era hiperactiva, ahora es el doble, ese hígado nuevo le trajo muchísima más energía; nosotros estamos contentísimos, ella es nuestro mundo.
“Voy a trabajar para poder llevar los sueños que ella tenga, para poder cumplirlos, le vamos a dar todo; ya quiero que entre al kínder para que hagamos manualidades”, dijo Perla.

Mileva padecía hepatoblastoma, es decir, un raro tumor maligno en el hígado, por lo que fue necesario un trasplante que fue realizado por personal de la Clínica 25 del Instituto Mexicano del Seguro Social.

“Si no se hacía rápido, ese tumor podía descontrolarse, invadir todo el cuerpo, y ya no habría nada más que hacer; ese riesgo siempre estaba latente.
“Se tenía que actuar oportunamente para contener el tumor en el hígado y hacer el procedimiento para que el pronóstico sea bueno”, recordó la doctora Liliana Tapia Brito.

Por su parte, el cirujano José Guillermo Martínez, quien practicó el trasplante, compartió el reto de adaptar el órgano donado, pues provenía de un joven de 21 años.

“El donador tenía un promedio de peso de 70 kilos, y la niña de 10k; esto significa que necesitábamos hacer un corte al hígado para adaptarlo al cuerpo de la niña”, explicó el especialista.

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