Atora tráfico ‘vías rápidas’ en la urbe regia

Eran “freeways” regios, pero ahora son hasta seis veces más lentos que como iniciaron, por el tráfico creciente que sufre la ciudad.

Y es que algunas de las avenidas de la urbe de Monterrey, que fueron diseñadas sin semáforos y con hasta cuatro carriles por cada sentido para conectar grandes distancias en tiempos cortos, ya perdieron su vocación. 

Ahora, la realidad es que son el epicentro de atorones cuyos trayectos terminan siendo varias veces más tardados de como se concibieron, e imposibles incluso de circular a 60 km/h —su máxima permitida—, ya que hay casos en los que la velocidad de rodamiento es de sólo 8 km/h. 

Así sucede con vialidades como el corredor de Constitución y Miguel de la Madrid, Garza Sada desde la carretera Nacional en Monterrey, Gonzalitos, Lázaro Cárdenas, Miguel Alemán y Morones, las cuales tienen el común denominador de no tener ni un solo semáforo o crucero, situación que da cuenta de que la urbe regia es la tercera más congestionada de México y la 50 a nivel mundial de acuerdo a la consultora INRIX. 

El equipo de El Horizonte recabó el tiempo ideal de recorrido por el que estas vialidades fueron diseñadas, considerando su extensión en kilómetros y la velocidad máxima permitida de 60 kilómetros por hora y lo comparó con la realidad.  

El caso más desafiante es a las 08:00 horas en la avenida Gonzalitos en el tramo de 5 kilómetros que va de Bernardo Reyes a Constitución, diseñado para un traslado de cinco minutos, llega a ser un tormento de 38 minutos en el que es necesario circular a 8 km/h. 

Le sigue el caso del corredor Miguel de la Madrid-Constitución desde Bonifacio Salinas hasta Gonzalitos, en el que salir a la misma hora que en el ejercicio anterior requiere una dosis de paciencia extendida a una hora y 10 minutos en el que el acelerador no pasa de los 11 km/h. Originalmente, este tramo es un recorrido de 13 minutos.  

En Lázaro Cárdenas, en San Pedro, los 10 kilómetros que van desde Gómez Morín hasta Garza Sada, en Monterrey, son un calvario a las 18:00 horas. Este recorrido, que originalmente debe demorar 10 minutos, es a esa hora un trayecto de 50 minutos con una velocidad obligada de 12 kilómetros por hora.  

Incluso Morones Prieto, una vialidad diseñada para cruzar Santa Catarina, San Pedro y Monterrey para llegar a Guadalupe en justo 30 minutos, es un trayecto de hasta una hora y 20 minutos saliendo a las 18:00 horas, rodando a 22 kilómetros por hora.  

Finalmente, en el análisis realizado por el equipo de investigaciones de este medio, se constató que Garza Sada-Carretera Nacional no es la excepción, pues toma 35 minutos recorrer 14 kilómetros saliendo a las 07:30 horas, por lo que es necesario rodar los coches en promedio a 24 km/h, cuando este recorrido está diseñado para hacerse en 14 minutos.

Los atorones 

En un recorrido realizado por El Horizonte desde el Aeropuerto Mariano Escobedo al sur de Monterrey se pudo constatar que estas arterias viales siguen trastocadas a pesar de que aún no se reactivan las actividades por completo en Nuevo León. 

Son las obras de las nuevas líneas del metro las que reducen los carriles en las avenidas por donde pasan, ya que esta ocasión boulevard aeropuerto presenta dificultades para poder ingresar y salir de las terminales aéreas. 

Esto por la ocupación alrededor de dos kilómetros de longitud de un carril en ambos sentidos por las obras del transporte urbano, otro tramo afectado es de casi 900 metros sobre Miguel Alemán entre el Boulevard Arco Vial y la calle Padre Mier en Apodaca. 

Pero la intersección con avenida constitución es donde resulta más cansado el traslado, pues entrar a esta vialidad que sigue con los carriles exprés obstaculizados por labores de reparación por los daños de Alberto, también se suma la edificación de la Línea 4 del Metro. 

Lo que limita a avanzar parcialmente a una velocidad promedio de unos 35 kilómetros por hora, haciendo que llegar a la avenida Garza Sada al sur de Monterrey, desde la calle General Bonifacio Salinas Leal tome entre 35 a 40 minutos. 

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