Zelensky y Trump negocian tregua entre Rusia y Ucrania

En una maniobra diplomática clave, el asesor principal de Volodímir Zelensky, Andriy Yermak, viajó a Estados Unidos para explorar posibles acuerdos con la próxima administración republicana de Donald Trump.

En encuentros realizados en Mar-a-Lago y Washington, Yermak abordó propuestas de cese al fuego en Ucrania y la continuidad del apoyo militar estadounidense.

La estrategia de Trump incluye un plan diseñado por Keith Kellogg y Fred Fleitz, que sugiere postergar el ingreso de Ucrania a la OTAN a cambio de un acuerdo de paz con garantías de seguridad. Según los asesores de Trump, dicha medida busca persuadir a Rusia de pactar una tregua duradera y prevenir futuros ataques.

Aunque la administración republicana se compromete a mantener el suministro de armamento a Ucrania, condiciona su apoyo a que Zelensky participe en conversaciones con Vladimir Putin.

Yermak se reunió con Susie Wiles, jefa de gabinete de Trump, y con otros miembros del futuro equipo de seguridad, incluyendo Mike Waltz, próximo consejero de Seguridad Nacional, y JD Vance, vicepresidente electo. Aunque reafirmaron que Estados Unidos seguirá respaldando a Ucrania, enfatizaron que la política bajo Trump tendrá un enfoque distinto al actual.

Cabe señalar que, Zelensky rechaza varios puntos clave de la propuesta, especialmente la idea de postergar su ingreso a la OTAN. El presidente ucraniano busca garantizar que el flujo de ayuda militar, que bajo Joe Biden alcanzó los 62 mil millones de dólares, continúe sin interrupciones.

Para 2025, la administración demócrata había aprobado 6,500 millones de dólares adicionales, una cifra que Zelensky quiere asegurar con la próxima administración.

Por su parte, Trump propone una estrategia que, según sus asesores, busca equilibrar intereses. La tregua incluiría límites territoriales negociados con Putin y la protección de las fronteras ucranianas tras el acuerdo, sin embargo esta perspectiva enfrenta oposición tanto de Ucrania como de aliados en la Unión Europea y la OTAN, quienes advierten que cualquier tregua no debe consolidar una victoria estratégica para Moscú.

A pesar de las tensiones, ambas partes continuarán negociando, conscientes de que cualquier acuerdo podría redefinir la dinámica geopolítica en Europa del Este.

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