Felicidades, Dan Marino… ¡por imponer récords en la NFL!

Esta semana toca el turno de una de las leyendas favoritas, el quarterback más talentoso que ha existido y un jugador adelantado a su época: el gran Dan Marino.

Nació el 15 de septiembre de 1961 en Pittsburgh, Pensilvania. Su carrera en la NFL abarcó desde 1983 hasta 1999, siempre jugo para los Miami Dolphins y se destacó como uno de los quarterbacks más talentosos y prolíficos de la historia del deporte.

Marino ingresó a la NFL después de una exitosa carrera universitaria en la Universidad de Pittsburgh. Fue seleccionado en la primera ronda del famoso Draft de 1983 por los Miami Dolphins, donde rápidamente demostró su habilidad para lanzar pases precisos con su poderoso brazo derecho. Durante su temporada de novato estableció varios récords, incluido el de más pases de touchdown en una temporada, un hito que se mantuvo por muchos años.

A lo largo de su carrera, Marino alcanzo números récords, entre los que destacan los siguientes:

- Yardas de pase: Al retirarse Marino tenía el récord de más yardas por pase en la historia: 61,361 yardas; hoy en día esta colocado en el octavo lugar en la lista histórica.

- Pases de touchdown: Impuso el récord con 420 pases de touchdown, hoy ocupa el séptimo lugar en la lista histórica.

- Más yardas aéreas y más pases de touchdown en una temporada: Marino sorprendió al mundo siendo el primer mariscal de campo en pasar la marca de las 5,000 yardas, logrando la marca de 5,084 yardas de pase y 48 pases de touchdown en la misma temporada, ambos récords de la NFL en su momento.

- Nueve veces al Pro Bowl: Marino fue seleccionado para el Pro Bowl en nueve ocasiones a lo largo de su carrera.

- 13 temporadas con 3,000 o más yardas de pase: Mostrando su consistencia, Marino alcanzó esta marca en 13 temporadas, un logro sin precedentes en su época.

A pesar de su éxito individual, Marino nunca ganó un Super Bowl, pero su legado sigue intacto. Al momento de su retiro, en 1999, ostentaba múltiples récords de la NFL.

Su estilo de juego influyó a generaciones posteriores de quarterbacks y dejó una huella indeleble en la liga, ya que logró en los 80 y 90 números sorprendentes, que en ese entonces no eran normales ver en ningún jugador de su época.

Después de su carrera como jugador, Marino se involucró en los medios de comunicación, trabajando como analista y comentarista de futbol americano. También se dedicó a actividades benéficas y a su fundación para ayudar a niños con necesidades especiales.

En resumen, la carrera de Dan Marino en la NFL fue una combinación de talento sobresaliente y pasión por el juego. Su precisión en los pases y su carisma en el campo lo convirtieron en una de las figuras más icónicas del futbol americano, dejando un legado que perdura en la historia de este deporte.

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