Aseguran que importación de autos está paralizada

La autoridad federal extendió por dos años el decreto para regularizar los vehículos “chocolate”, pero se les olvidó el que corresponde a la nacionalización de unidades motrices a través de la Aduana lo que mantiene una parálisis en esta actividad lo anterior lo dio a conocer el empresario importador Tomás Cantú González.

Recordó que el decreto de nacionalización inició desde el 2000 y funcionó hasta septiembre pero tiene tres semanas que no pueden realizar ni un trámite con este tipo de proceso.

“El decreto terminó y ahorita ya no se puede importar bajo decreto que nos forzaba a realizar  ese proceso porque existía un tratado de libre comercio”, mencionó.

Señaló que al no existir un decreto para la importación de vehículos se tiene que hacer de acuerdo a las reglas que marca el T-MEC  se puede  importar desde un vehículo 2023 hacia abajo, y presentando un documento que se llama certificado de origen ante la autoridad aduanera, el pedimento se paga, se exceptúa el impuesto general de importación y solamente se paga el IVA.

“Para que me entiendan de pagar $30, $40,000 pesos, esto se va a $12, $13,000 pesos, lo que beneficia a todo mundo pero  ¿qué es lo que pasa? Que ahorita en Juárez y en Nuevo Laredo ya metieron carros de esta manera y los tienen detenidos con el argumento de que están en revisión”, explicó. 

Comentó que en Matamoros y en Reynosa y en todas las ciudades fronterizas donde hay este rubro, están detenidos los comercializadores porque no quieren tener los carros parado en la Aduana una, dos, tres semanas o el tiempo que la autoridad determine.

“La verdad que esta parálisis no tiene razón de ser porque estamos importando un vehículo apegados a una ley, que es más arriba que un decreto y más que hoy el decreto ya no existe; entonces lo que le pedimos a la autoridad es o nos van a dejar trabajar bajo el T-MEC o saquen un decreto”, precisó.

Solicito a la autoridad que si se piensa en un decreto se debe de tomar en consideración a los importadores.

“Pero háganlo ya, porque tenemos tres semanas sin trabajar, los gastos no se detienen y si esto no se avanza rápido hay peligro de cierre de muchas empresas, desde Tijuana hasta Matamoros”, puntualizó.