Regresa el Golf 8 renovado por dentro y por fuera

El clásico en ventas de Volkswagen se renueva por dentro y por fuera. Hablamos del Golf 8, que llega con todo a finales de este año comenzando su venta en Alemania y Austria para después continuar con el resto de Europa y algunos países de América. Aún se desconoce si México entra en los planes, pero no lo dudamos debido a la alta demanda que tiene el modelo en nuestro país.

Comenzaremos diciendo que la octava generación del Golf cuenta con dos variantes híbridas enchufables, una con 204 Hp y la deportiva de 245 Hp (GTE). En ambos casos viene incluida una nueva batería de iones de litio de 13 kWh que permite una autonomía del modo eléctrico hasta de 60 kilómetros. También está disponible con motores de combustión. Los de gasolina TSI tienen como opciones dos motores de cuatro cilindros con 90 y 110 caballos de fuerza respectivamente. La renovación del célebre compacto germano pone especial énfasis en el confort del interior, con la firme intención de competir con el Ford Focus, el Honda Civic, el Renault Mégane, el Opel Astra y el Seat León.

En cuanto a su aspecto, lo que más destaca es su frente más “afilado”. Sus líneas laterales son muy similares a las de la séptima generación y cuenta con un ‘splitter’ más prominente. El interior cuenta con un seductor dominio de dos pantallas, una para el sistema multimedia y otra para el panel de instrumentos, que es una gran superficie digital, táctil y con control de voz, que proporciona al conductor información a detalle.

La pantalla se acompaña de un nuevo sistema de infoentretenimiento de entre ocho y 10 pulgadas, dependiendo del modelo, y compatible con Apple CarPlay y Android Auto. El espacio entre el conductor y el copiloto es ahora un poco más estrecho, ganando con ello más comodidad para los tripulantes. Cuenta con tecnología Car2X que le permite interactuar con su entorno, enviar y recibir datos y facilitar la conducción, por ejemplo, si detecta una ambulancia o un siniestro dentro de su radio de operación no superior a los 800 metros le muestra una señal al conductor.

Tiene además un control de crucero adaptativo activo capaz de trabajar a velocidades de hasta 210 km/h con múltiples asistentes, como mantenimiento de carril, reconocimiento de señales, alerta para ángulo muerto y frenado autónomo de emergencia, entre otros. Los modelos R-Line y GTE tienen tomas de aire más grandes y emblemas especiales para identificarlos. De acuerdo con las diferentes versiones puede incluirse aire acondicionado automático de doble zona, calefacción en asientos, quemacocos y puertos USB-C. Sus dimensiones no varían mucho de sus anteriores versiones, con una longitud de 4,284 mm, una anchura de 1,789 mm y una altura de 1,456 mm.