¿Qué es la sequedad bucal?

Todos, alguna vez, hemos sentido la boca seca; especialmente si hemos estado nerviosos, molestos o muy tensionados. Sin embargo, si esto sucede de manera frecuente, podría indicar la existencia de otra afección médica más importante.

Estas afecciones se producen porque la función de la saliva no es solamente la de mantener la boca húmeda: La saliva ayuda a digerir los alimentos, protege los dientes contra las caries, evita infecciones al controlar la población de bacterias en la boca y posibilita la masticación y la deglución.

Hay varias razones por las cuales las glándulas que producen la saliva, denominadas glándulas salivales, podrían no estar funcionando adecuadamente. Estas razones podrían ser: Efectos colaterales de ciertos medicamentos, así como algunas enfermedades entre ellas la diabetes, el mal de Hodgkin y de Parkinson, que afectan a las glándulas salivales y pueden producir sequedad bucal.

Los síntomas de la sequedad bucal son: Sensación de sequedad y de boca pastosa, dificultades para deglutir, sensación de ardor en la lengua, sensación de sequedad en la garganta, así como labios partidos, y mal aliento frecuente.

La única forma de curar la sequedad bucal es tratar sus causas. Si la sequedad se debe a algunos medicamentos, el especialista debe cambiar la prescripción o la dosis. Si las glándulas salivales no están funcionando correctamente, pero producen algo de saliva, el médico prescribirá un medicamento que ayudará a las glándulas a trabajar mejor.

Si la causa de la sequedad no puede eliminarse, la humedad de la boca se podrá recuperar de diferentes modos. El dentista recomendará el uso de humedecedores bucales, como sustituto de la saliva. Además los enjuagues bucales especialmente formulados para la sequedad bucal proporcionan alivio.

Qué acciones puedes emprender

• Toma frecuentemente agua o bebidas sin azúcar.
• Evita las bebidas como café, té o gaseosas que pueden producirte sequedad.
• Mastica chicles sin azúcar o caramelos duros sin azúcar, para estimular el flujo salival (en caso que exista cierto funcionamiento de la glándula salival).
• No fumes ni bebas alcohol ya que producen sequedad bucal.

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