Salud

Cáncer de mama: ¿Qué hacer después de un diagnóstico positivo?

Recibir un diagnóstico positivo de cáncer de mama pone a la mujer en un estado de alarma, sin embargo, debe saber que teniendo cuidados específicos que beneficien a la salud en general, puede asegurar una buena calidad de vida

  • Por: EH
  • 19 Junio 2021, 17:14

¿Qué es el cáncer de mama? Una enfermedad en la cual las células de la mama se multiplican sin control. Existen distintos tipos, los cuales dependen de qué células de la mama se vuelven cancerosas.


Quienes reciben un diagnóstico positivo deben tomar ciertas medidas y realizar algunos cambios en su rutina diaria y hábitos con el fin de asegurar salud y bienestar prolongado.

Muchas de las modificaciones que se mencionan más adelante son sugeridas por el médico de cabecera o un especialista en ginecología, algunos de ellos se pueden realizar por cuenta propia.

Recibir un diagnóstico positivo de cáncer de mama pone a la mujer en un estado de alarma, sin embargo, debe saber que teniendo cuidados específicos que beneficien a la salud en general, puede asegurar una buena calidad de vida.

Alimentación para pacientes con cáncer de mama

La alimentación juega un rol importante dentro del manejo de cualquier enfermedad, desde una gripe hasta un padecimiento más serio, como lo es el cáncer.

Infinidad de sitios en Internet podrán ofrecer múltiples recursos que hablan sobre cambios en la dieta diaria que deben realizarse tras el diagnóstico de este padecimiento; incluso muchos de ellos ofrecerán “tratamientos” y “curas milagrosas”.

Ante ello, la recomendación es mantenerse distante de estos sitios y no recurrir a dietas extremistas. Ante cualquier duda, lo mejor es primero acudir al nutriólogo certificado o al médico de cabecera.

Se debe tomar en cuenta que ante modificaciones drásticas en la alimentación, las personas sufren cambios, pequeños o significativos, depende de cada organismo humano, que podrán tener un efecto sobre la sensación de bienestar general.

Si se quiere empezar por cuenta propia, mientras se tiene un cita con el especialista en nutrición, se puede comenzar con la eliminación de bebidas carbonatadas y alcohólicas del consumo diario.

Las bebidas carbonatadas y alcohólicas en combinación con ciertos medicamentos, indicados durante el tratamiento, podrían producir náuseas, vómito, distensión abdominal y malestar en general.

También se recomienda disminuir el consumo de grasas trans y grasas saturadas, presentes en carnes rojas, carnes procesadas y embutidos, productos que además contienen grandes cantidades de sal y conservadores, ingredientes que deben limitarse en pacientes dentro de programas de tratamiento anticancerígeno.

Actividad física y tratamiento para cáncer de mama

Como se mencionó anteriormente, padecer una enfermedad conlleva crear nuevos hábitos, entre ellos, contemplar la actividad física diaria.

Es probable que en etapas más avanzadas del tratamiento anticancerígeno la persona llegue a sentirse fatigada o con poca energía, pues algunos tratamientos llegan a ser cansados y extenuantes. Aun así, es recomendable llevar a cabo pequeñas rutinas de ejercicio.

Por ello, desde el diagnóstico positivo de cáncer de mama, la paciente debe considerar una agenda donde incluya la actividad física diaria o, por lo menos, de dos a tres días a la semana, a manera de mantener una buena salud cardiovascular.

Pero ojo, estas rutinas de ejercicio no deben ser de alta intensidad (correr o levantar pesas, por ejemplo) sino actividades de bajo impacto como lo son el yoga o una camioneta ligera, las cuales además de los efectos benéficos, fortalecen los músculos, articulaciones y mejora la condición física, ayudan a relajarse y sentirse mejor.

Disciplina y organización ante el cáncer de mama

Bajo esta condición de salud es primordial tener disciplina y organización. Someterse a un tratamiento médico como lo es la quimioterapia o radioterapia conlleva una planeación de actividades con tiempo y llevar un orden del día a día, para no perder citas y descansar después de cada sesión.

Se recomienda tener un calendario o un organizador mensual que permita registrar días programados para la terapia y horarios para tomar los medicamentos, evitando retrasos en terapéutica.

Parecería un detalle sencillo, pero mantener organización y el control del día a día es esencial sobre las acciones necesarias a tomar para mantener una sensación de tranquilidad al saber que se está cuidando de la salud de forma oportuna y efectiva.

Por último, cabe destacar que cada persona responde de forma distinta a la quimioterapia o radioterapia, por lo que ante cualquier duda es recomendable acercarse al médico encargado del caso. Además, no dudar en consultar a otras mujeres que hayan sido diagnosticadas con cáncer de mama, quienes seguro tendrán más de un consejo para ofrecer. También, existen grupos de apoyo para mujeres con este padecimiento, donde se llevan a cabo actividades y sesiones de consulta que pueden ser de mucha ayuda.

Jorge Valenzuela / Médico Cirujano


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