Los delitos familiares van al alza de forma imparable. Nuevo León ocupa el tercer lugar a nivel nacional en este rubro, lo que lleva a comprender el incremento de delitos relacionados, como los delitos sexuales y feminicidios.
Al corte del mes de octubre, en Nuevo León se interpusieron 21,597 denuncias por delitos familiares, lo que habla de un grave deterioro del tejido social en la entidad.
Mientras no tengamos la capacidad de recomponer la armonía familiar, el entorno social y comunitario, estaremos condenados a vivir con violencia.
La acción gubernamental juega un rol determinante para lograr la reconversión social, especialmente en los municipios, que son la autoridad más próxima a la ciudadanía, el primer respondiente.
En este sentido, debemos enfocar mayores esfuerzos a recomponer el entorno y generar espacios públicos que fomenten la sana convivencia. Necesitamos autoridades comprometidas con atender las causas, no solo enfocarnos en crear instituciones reactivas que no se dan abasto ante el alza tan elevada de los delitos.
Municipios como Monterrey están muy enfocados en el rescate del espacio público, transformando el entorno de plazas abandonadas y llenas de basura, por espacios recreativos y verdes. Desde el inicio de la administración de Adrián de la Garza, en octubre pasado, se ha logrado recuperar el 60% de los espacios públicos.
En Escobedo, el alcalde Andrés Mijes ha continuado la estrategia de recomposición del tejido social que inició Clara Luz Flores, a través del programa de bosques urbanos en las colonias con mayor población y con mayores retos. Se trata de reforestar la ciudad y crear espacios amigables y verdes, en donde se pueda regenerar la colonia, el medio ambiente y la calidad de vida de la gente.
Debemos insistir en apoyar estas iniciativas y promover que todos los municipios se enfoquen en atender las causas y generar condiciones sociales que cambien el ánimo y la actitud de la población.
El Dr. Mario Alonso Puig, especialista en mindfulness (técnica de meditación que busca entrenar la mente para centrar la atención en el momento presente), se presentó en el Showcenter. Una parte central de su charla estuvo enfocada en la importancia de la salud mental y de cómo la sociedad es parte fundamental para lograrla. De ahí la importancia de la rectoría de las autoridades para conducir entornos sociales propicios.
Mucha gente se pregunta el por qué el incremento de los delitos familiares, la descomposición social y la constante violencia contra las mujeres, si cada vez tenemos legislaciones más robustas y organismos especializados, pero sin resultados positivos.
No hay una sola respuesta. La mente humana es sensible a un sinfín de estímulos. La descomposición familiar y el maltrato, sin duda, conducen a ello, pero desde lo público se debe reforzar la importancia de los valores, construir ciudades resilientes con justicia ambiental, sistema de cuidados y centros para meditar, para tratar las condiciones de la mente, con apoyo a todos los grupos sociales, especialmente a los más jóvenes. Nuestros niños deben ser considerados nuestro mayor tesoro; de ahí parte todo.
Posdata: Llegó el presupuesto al Congreso, y los municipios ven castigadas sus participaciones presupuestales. ¿Así cómo podremos aspirar a cambiar nuestro entorno?