Muchos diputados locales no quieren trabajar ni desquitar el sueldo ni las jugosas prestaciones que les pagamos los nuevoleoneses. ¡Ya es hora de que prestemos atención!
Desde que se instaló la 77 legislatura del Congreso de Nuevo León, no han acordado seguir con los demás procesos legislativos (como es su obligación legal y moral).
De ahí que esto no sea un artículo; es el llamado de miles y miles de ciudadanos de Nuevo León para que de manera urgente se integre la Mesa Directiva del poder legislativo local sin sombra de sospechas y exigiendo que se repita la votación para que todas las bancadas queden conformes sobre quién presidirá este periodo legislativo. Es lo mínimo que deberían hacer.
Los ciudadanos de Nuevo León, ejerciendo nuestro derecho a participar en asuntos públicos, con base en lo dispuesto en los artículos 8º y 35 de la Constitución federal y en concordancia con los derechos establecidos en la Ley de Participación Ciudadana en Nuevo León, exigimos que los (in)honorables legisladores instalen correctamente la Mesa Directiva. Si no pueden que se vayan.
Si la primera minoría la tiene MC con 10 diputados (el PRI no logró sus 10 diputados, pero se pirateó los dos del PRD y lo hizo antes de tomar protesta la Legislatura 77), ¿a quién le toca presidir la Mesa? Obviamente a MC.
Tan injustificable retraso causa ya graves afectaciones en el funcionamiento de este órgano legislativo.
¿Pero qué pasa si no se instala bien la Mesa Directiva? La Ley Orgánica del Poder Legislativo es muy clara en su artículo 20.
De no acatarse este procedimiento, tampoco se podrá cumplir con las sesiones ni coordinar las labores del Pleno.
Además, tampoco se acatará lo establecido por el artículo 52 que señala la obligación (¡ojo con esto!) de elegir a los integrantes de las comisiones para el análisis y dictamen de los asuntos públicos que les corresponden. Vamos muy tarde.
Este incumplimiento, sin antecedentes en Nuevo León, viola flagrantemente el mandato constitucional. Así que muchos coincidimos en que sea el Tribunal Electoral estatal quien resuelva el enredo, ante quien acudió la bancada de MC para deshacer la designación de la priista Lorena de la Garza como presidenta de la Mesa Directiva.
De manera que los legisladores locales del “PRIAN” vulneran el principio de legalidad, generando un vacío institucional en donde el único que sale perdiendo (para variar) es el pueblo de Nuevo León.
Esto es escandaloso, mezquino y ruin.
Con su injustificada parálisis legislativa, nos privan a los nuevoleoneses de la adecuada representación, posponiendo los asuntos públicos urgentes. Y recordemos que los diputados locales no se mandan solos. Nosotros, los ciudadanos, los mandamos a ellos. Son nuestros empleados.
¿Cómo pueden quitarse los diputados locales la negra mancha del desprestigio que ya es generalizado?
1.- Repitiendo de inmediato la votación para instalar la Mesa Directiva conforme lo establece la Ley Orgánica y la Constitución estatal.
2.- Procediendo a la brevedad con la elección de las comisiones legislativas, de modo que los trabajos puedan iniciarse sin más demora.
3.- No yéndose de vacaciones (menos en vuelos VIP) al extranjero, en mitad de un vacío legislativo que puede derivar en crisis de gobernabilidad. ¿Tan difícil es entenderlo?