Las pensiones en México: un dolor de cabeza; en especial para el magistrado

Todo trabajador que cumpla con lo establecido por la reglamentación correspondiente tendrá derecho a una pensión determinada. En los países vecinos del norte, así como en los europeos, las pensiones son para verdaderamente vivir “el jubileo”. 

Es decir, gozar de la vida con las prestaciones que la ley, en materia de seguridad social, otorgue. Traducido lo anterior, significa que podrás vivir (no solo sobrevivir) dignamente con los emolumentos que se hayan generado, así como también tener las prestaciones inherentes a ella. En México, entiéndase como prestaciones del Seguro Social o del ISSSTE.

Ahora bien, en nuestro país, ¿los pensionados y jubilados viven dignamente? Hasta la pregunta es necia: ¡Claro que absolutamente no! No obstante, distintos gobiernos, incluyendo el de AMLO, han dicho, jurado y perjurado que las pensiones, es decir, el sistema de pensiones, se ha modificado y/o perfeccionado tanto que una familia puede vivir de una manera honrosa. 

En el magisterio nacional existen generalmente dos subsistemas laborales: el estatal y el federal. Éste está regulado por la ley del ISSSTE; aquél está, a su vez, regulado por la misma ley, pero adaptada a las leyes estatales de la materia. Para el caso, es lo mismo.

Es menester informar que, en el supuesto de los maestros federales, los montos a pensionarse y jubilarse están enmarcados en UMAS y a un tope salarial (aproximadamente 33,000 pesos mensuales) y no al salario mínimo. En el caso de los maestros estatales, al menos aquí en Nuevo León, están supeditados a un tope salarial. ¿Tope salarial? ¡Sí, a un tope! 

Ello quiere decir que jamás vas a superar dicha cantidad asignada, muy a pesar de que, al momento de jubilarte, tu salario mensual sea superior a dicha cantidad considerada como tope. Solo se recibirá posteriormente el incremento inflacional, del año según sea. 

Los maestros tienen dos vías para jubilarse: los federales que están enmarcados bajo la ley del ISSSTE anterior a la reforma de 2007, y los posteriores a ella. Los maestros estatales (de Nuevo León) que están dentro de la ley del ISSSTELEÓN anterior a 1993, y los posteriores a ella. Pero, ¿qué significa ser “posterior” a ella en ambos casos? Significa que podrán recibir sus pensiones solo por la vía de “las cuentas individuales”. Es decir, se obtendrá lo que se haya ahorrado solamente. Claro está que, además, se deberá de dejar dinero en la cuenta para recibir “una mínima pensión garantizada” hasta el resto de tus días. ¿Cómo la ven? 

Con las cantidades del tope salarial descritas con antelación, ¿ustedes creen que se podrá viajar tranquilamente por los cinco continentes? Al parecer, ni este gobierno de la “cuarta transformación” hará cosas trascendentales en esta materia. En días recientes, el nuevo director general del ISSSTE, Martí Batres, compareció en “las nuevas mañaneras” para exponer el nuevo plan general de renovación del ISSSTE. 

En este nuevo supuesto, Batres expuso que existen muchos jubilados que reciben cantidades extraordinarias, muy superiores a los 33 mil pesos del tope de ingreso mensual. Por otro lado, hay una enorme cantidad de mexicanos que recibían, por el mismo concepto, cantidades “muy irrisorias”. Al tenor de su aseveración, remató expresando que “les quitará a los que reciben más para dárselo a los que reciben menos” (Robin Hood mexicano). ¡Tómala! ¿Cómo así?, como dicen los colombianos. La verdad, sí le creemos que esto sea posible, ya que pueden obedecer o no, o cambiar la “Santa e Inmaculada” Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos a su antojo.

Si de cambiar se trata a la Carta Magna, ¿por qué no cambiar que, en lugar de considerar las UMAS para jubilarse en el sector federal, se tome el Salario Mínimo como referente? ¿Ah, verdad? Y otra cosa más: ¿porqué no disminuir la edad cronológica para poder jubilarte? 

Por el mismo rumbo estatal, más rápido que aprisa habrá reunión de secretarios generales y representantes de centros de trabajo en la sección 50 del SNTE este sábado 18 de los corrientes. ¿Será ya el ansiado Pleno Seccional, donde Juan José Gutiérrez Reynosa, secretario general, dará cuenta y seña de los recursos económicos que ha manejado y que, precisamente, están muy cuestionados? La verdad como es, se tenía que decir y se dijo. Hasta la próxima.