Luis_Sampayo_1x1_1739f6d810
Opinión

Tormentas

El Purgatorio de @elcabritomayor

Más allá de las esperanzadoras, ansiadas y necesarias precipitaciones pronosticadas por los servicios meteorológicos para esta semana, que supone, deberán de traer consigo una notoria baja en los infernales niveles de temperaturas que padecemos y un alivio en los cauces de la agonizante sequedad de las presas, “los oraculeros”; es decir, las personas que saben interpretar las señales de los oráculos, y en este caso los oráculos políticos, pronostican por necesaria consecuencia del copioso huracán ciudadano-electoral desatado apenas el pasado 2 de junio, una serie de tormentas políticas entre algunos de los diversos candidatos, partidos, autoridades, poderes y estructuras de gobierno.

Como si se tratara de una obra de teatro monumental, el drama, la comedia, el celo, la codicia y la voracidad de algunos de los actores y directores de escena que en la previa mediática de sus “ensayos” dejaron ver su naturaleza guerrera, fortalecen los argumentos de los “oraculeros” (entiéndase politólogos), en el sentido del tormentoso proceso legal que se nos avecina y que por todos los lados de la cuestión, lesionan justamente el respeto y la voluntad genuina emitida en las urnas por los cumplidos y abnegados electores.

Y es que luego del ejemplar huracán (ejemplar por la alta y concienzuda participación ciudadana), registrado el día de las elecciones, la reconfiguración en el escenario político aún sigue entre el jaloneo y la pugna bajo el manto de la judicialización de algunos de los procesos que dejó por lógica, además de perdedores, algunos tras bambalinas, muy evidentes inconformes.

Tras meses de arduas y extenuantes jornadas electoreras en la preselección, selección y designación de quienes se “sacaron la rifa del tigre” para encabezar sus respectivas campañas y que el elector tuvo que soportar a golpe de una sorda pero evidente paciencia, el transcurrir del tiempo desde el día de la elección a acá, inevitablemente ha atraído consigo un marcado cansancio ciudadano y a la par de una degradación natural que se aloja en la mente y sentimiento electoral, sobre la autenticidad y la justicia de los reclamos proclamados.

Participar en la política con honestidad, honor y, por consecuencia, con honra, aceptando las reglas del juego en el sentido de respetar la voluntad ciudadana en donde se puede ganar pero reconociendo que también se puede perder, es ganar en una política sana, transparente y honesta, esa misma que tanto reclama la sociedad y que cada elección la solicita en las urnas.

Así pues, estimado lector, se nos viene además de la “tormenta” natural del agua pronosticada para esta semana “la otra tormenta”, la judicial electoral, que por los reclamos personales de algunos que no reconociendo perder ante la voluntad ciudadana se manifiestan inconformes con los procedimientos y la legalidad de los pasados procesos.

Y por si fuera poco, luego también y en aras de la consecución de la justicia, los referidos “oraculeros” pronostican otro “tormentón” para la semana que hoy inicia y que muy probablemente podría caer en las inmediaciones de la “Macroplaza”, justamente sobre los territorios políticos en conflicto que ya desde hace algunos ayeres se disputa un nutrido grupo de curulecos opositores al habitante del despacho gubernamental del Palacio de Cantera y a quien, dicho sea de paso, las circunstancias junto con el tiempo le podrían cebar, además de su entusiasta gestión, su prometedora gira por Japón, China y Corea.

El pronóstico de esta “tormenta” podría ser apenas el preámbulo de una más prolongada y torrencial pugna entre poderes que como si fuera un huracán combinado con un maremoto, ha sido bautizado legislativamente con el término de “juicio político” y en donde, como choque de trenes, prevalecerá quien tenga el poder de soportar los embates adversos ganados a pulso y ubicados justamente en la particular trayectoria de su propio destino. 

Así pues, estimado lector, cuídese y protéjase de todas las tormentas naturales y políticas pronosticadas para esta semana.

Por hoy es todo, medite lo que le platico, estimado lector, esperando que este nuevo amanecer se traduzca en un reflexivo día, por favor cuídese y ame a los suyos; me despido honrando la memoria de mi querido hermano Joel Sampayo Climaco, con sus hermosas palabras: “Tengan la bondad de ser felices”. Nos leemos, Dios mediante, aquí el próximo lunes.

más del autor

La chingada

Partiendo desde el principio y disculpando el pleonasmo implícito en estas...

El agual

Luego de implorar por años la benevolencia del dios Tláloc para regar con...

¿Qué pachó?

Luego de la muy razonable sensación de “¿alguien apuntó las...

Nuevo amanecer

El espíritu cívico, nacionalista y libertario de los mexicanos que exigen...

últimas opiniones

¿Por qué el nombramiento de Rosa Icela Rodríguez en Segob reconfigura los liderazgos de la 4T en Nuevo León?

Rosa Icela Rodríguez será la próxima secretaria de Gobernación. Hace una...

A tres semanas de Alberto, las aguas siguen turbias en Nuevo León

Alberto se fue y los problemas se acentúan en el estado. Comenzando por el...

El karma es una perra, Segunda parte

“Etimología: Proviene de la raíz kri: ‘hacer’ (según el Unadi-sutra...

×