La Melissa es la mejor aliada de tu familia; ayuda a reducir la ansiedad, la hiperactividad y el estrés, al trabajar sobre el sistema nervioso.
A veces las madres me preguntan si hay alguna planta que pueda mejorar la atención y el rendimiento escolar de sus hijos. Lo cierto es que sí la hay, y se llama Melissa.
Esta plantita, parecida en su estructura anatómica a la Hierbabuena y la Menta, es la mejor aliada de tu familia. También conocida como limonaria por su aroma cítrico y delicioso sabor, la Melissa officinalis trabaja sobre el sistema nervioso, reduciendo la ansiedad, la hiperactividad y el estrés.
A los niños les ayuda a mejorar su atención y concentración, lo que se refleja en una mejora en su rendimiento académico. La Melissa también contiene antioxidantes, vitaminas y selenio, lo que ayuda a mejorar el sistema de defensas y a proteger del daño causado por oxidación a las mismas células.
La Melissa es una planta muy segura en su uso, no presenta riesgos ni contraindicaciones. La Agencia Europea del Medicamento (EMA), recomienda el uso tradicional de la Melissa para aliviar los síntomas de estrés mental y para facilitar el sueño, así como para los trastornos digestivos leves, como distensión abdominal y flatulencia.
Estudios han demostrado mejoras significativas en el desempeño cognitivo y sensación de bienestar, después de tomar el extracto concentrado de la planta.
Una manera deliciosa de consumir la Melissa es a modo de limonada. Primero prepara una infusión concentrada de Melissa (2 cucharadas de planta en media o una taza de agua hirviendo). Ya fría y colada se agrega agua natural, o mineral, si se desea gaseosa, para completar un litro.
Se exprimen de 2 a 4 limones, y se endulza al gusto, de preferencia con miel o piloncillo natural. ¡Listo! Tienes una deliciosa limonada que ayudará a tus hijos a estar tranquilos y concentrados, y a los adultos a manejar mejor el estrés y mantenerse relajados.
Desde hace varios años, las madres solían darle a los niños, aceite de hígado de bacalao, y es algo que te recomiendo hagas también con tus hijos, porque además de aumentar las defensas y darles mayor resistencia ante las gripas y catarros, mejora la concentración y ayuda en el desarrollo intelectual.
Por su aporte de Vitamina D ayuda a que se fije el calcio a los huesos, favoreciendo el buen crecimiento óseo en los menores. También es útil en alergias, asma y enfermedades respiratorias. Sus beneficios son múltiples.
Es indispensable en mujeres embarazadas y madres lactantes. En el primer caso porque ayuda al desarrollo del tubo neuronal y el desarrollo cerebral del bebé que se está formando, además previene a los bebés prematuros.
En madres que están amamantando, les ayuda a sus bebés para el desarrollo completo del cerebro y sistema nervioso, además de evitar la descalcificación de la madre durante el período de lactancia. También ayuda a prevenir la depresión posparto.
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