El año 2024 será recordado como un periodo de grandes logros y retos para los mercados financieros globales, según el análisis del destacado trader de Goldman Sachs, John Flood.
En un escenario donde el S&P 500 alcanzó 57 nuevos máximos históricos y logró su mejor desempeño acumulado desde 1997, los temas clave fueron liderados por la inteligencia artificial (IA), las acciones de las “7 Magníficas”, y un entorno macroeconómico marcado por ajustes en la política monetaria y fiscal.
La primera mitad del año 2024 estuvo dominada por un impulso positivo heredado de 2023, con un protagonismo destacado de las siete grandes tecnológicas (AMZN, AAPL, GOOGL, META, MSFT, NVDA, TSLA), que llevaron al S&P 500 a 38 nuevos máximos. La euforia por la IA continuó, consolidando a NVIDIA como líder del mercado bursátil estadounidense. Sin embargo, en el segundo semestre, la narrativa evolucionó hacia una diversificación de temas, incluyendo la reconstrucción de Ucrania, un cambio hacia valores de pequeña capitalización y un mejor desempeño de sectores como el valor sobre el crecimiento.
Uno de los eventos más destacados ocurrió el 5 de agosto, cuando el Nikkei japonés cayó un 12.4%, su peor día desde 1987. El índice de volatilidad (VIX) alcanzó 65 puntos en premercado, mientras el S&P 500 sufrió una caída del 3%, generando tensión entre los inversores.
La Reserva Federal actuó de manera decisiva para estabilizar los mercados, recortando las tasas de interés en 50 puntos básicos en septiembre y otros 25 en noviembre. La probabilidad de un nuevo recorte esta semana se estima en un 95%. Estas acciones se realizaron en un contexto de máximos históricos del índice bursátil S&P 500, destacando la capacidad del banco central para maniobrar hacia un aterrizaje suave. El consenso apunta a una tasa terminal entre 3.25% y 3.5%, impulsada por factores como los amplios déficits fiscales y una resiliencia del sentimiento de riesgo.
Por otra parte, la victoria contundente de Donald Trump en las elecciones de noviembre marcó un giro significativo, pues su promesa de recortes fiscales, desregulación y un enfoque proempresarial catapultó al S&P 500 por encima de los 6,000 puntos, mientras la volatilidad se desplomó.
Este entorno estimuló el regreso de inversores minoristas al mercado, con un auge en las operaciones de lotes pequeños y un renovado interés en activos como el bitcoin, que superó los $100,000 dólares.
A nivel internacional, la postura de los inversores estadounidenses hacia China se mantuvo negativa, influenciada por la deflación, los aranceles y el bajo crecimiento económico, pese a los esfuerzos del Banco Popular de China con estímulos monetarios y fiscales. La posibilidad de un bloqueo a Taiwán sigue siendo un riesgo latente, al igual que las preocupaciones sobre el sistema bancario chino.
Los economistas de Goldman Sachs esperan que la segunda administración de Trump imponga aranceles más altos a China y a los automóviles, una inmigración mucho más baja, algunos nuevos recortes de impuestos y flexibilización regulatoria, factores que podrían influir negativamente en México, tanto de manera directa como indirecta.
Oportunidades de inversión en los mercados para 2025
Flood identifica cinco estrategias clave para el próximo año en el mercado estadounidense:
- “Think Big” (piensa en grande): Aunque las “7 Magníficas” seguirán superando al resto del S&P 500, el margen se reducirá significativamente debido a un crecimiento de EPS más equilibrado.
- “Maximizar opciones”: Invertir en acciones con alta probabilidad de fusiones y adquisiciones, un área que se espera crezca un 25% interanual.
- “Low Rent, High Stakes”: Apostar por empresas con ingresos vinculados a pequeñas y medianas empresas, impulsadas por un entorno más favorable.
- “Deliver the Goods”: Enfocarse en la tercera fase de la evolución de la IA, donde las empresas monetizan tecnologías.