Muuuchas preguntas quedaron sin responder en aquel misterioso incidente donde escoltas de una supuesta “empresa de seguridad” se enfrentaron en calles de San Pedro y hasta armas largas salieron a relucir…
Afortunadamente el extraño suceso no pasó a mayores, lo que permitió que el gobierno de San Pedro se limitara a informar que “se descartaba un hecho violento” —como queriendo decir, “entre criminales”—…
Y sólo refirieran que se trató de “un incidente entre escoltas de una misma empresa de seguridad privada —“Buscraf”—, posterior a un percance vial menor”… What??
La explicación, sinceramente, no hacía mucho sentido, pero entre tanta cosa pasó desapercibida… Nomás que ahora Protágoras se entera que lo que pasó realmente es más interesante y pareciera haber motivos para que la policía ocultara detalles… ¡Ufff!
Ahí le va… Rrrresuuultaaa queeee, caía la noche sobre San Pedro el pasado jueves 10 de abril, cuando el tripulante de una camioneta Ford Raptor gris blindada, que venía escoltado por una Yukon sobre la av. Gómez Morín, comenzó a darle “picones” a otros escoltas que venían abordo de una Ram, y que venían protegiendo a una mujer sampetrina con sus hijos, que iban en una camioneta Urus…
¿Qué detonó esos picones? No se sabe con certeza, pero todo indicaría, según escucha Protágoras, que el tripulante de la Raptor fue el que comenzó a manejar agresivamente porque “algo no le gustó”, y desde la altura de Palacio de Hierro estuvieron amagando y cerrando a los escoltas de la Ram, luego dieron vuelta en Roberto Garza Sada y siguieron hasta que los chocaron levemente, ya en el cruce de Roberto y Lomas del Valle…
Tras el percance, los escoltas de la Urus intentaron que se detuviera el sujeto de la Ford Raptor, pero éste llamó a otros escoltas que llegaron en una Interceptor blanca, y para permitir que su “jefe” escapara, se le cerraron a la Urus y hasta la impactaron por un lado, siendo que adentro iba una mamá con sus hijos… ¡De no creerse!
Eventualmente, aunque el de la Raptor sí escapó, los escoltas de la mujer lograron someter a los otros escoltas y de ahí se derivan esas imágenes donde se ve a un escolta contra el piso… ¡Riájale!
Dicen que en Tránsito de San Pedro ya hay otros reportes contra ese sujeto por otros incidentes, los cuales rara vez llegan a la opinión pública, pues “alguien” en el municipio lo protege… ¡Ay’joesú!
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De San Pedro nos vamos hasta Washington, D.C., en EUA, donde el actual ocupante de la Casa Blanca, el señor Donald Trump, un día amenaza con unos aranceles, otro día los quita, y al día siguiente pone otros…
Hay quien piensa que está dando “tumbos”, pero los especialistas cercanos al tema dicen que, lejos de ser “ocurrencias”, son estrategias muuuuy bien planeadas…
En las partidas de poker se les llama “bluff”, pero el único problema ocurre cuando ya no le creen al que “bluffea”…
Por lo pronto, este aún parece no ser el caso porque Trump sí ha cumplido muchas de las amenazas, con todo y que muchos creen que “se está dando un balazo en el pie”… Pero Trump le apuesta a que los reacomodos, al final, le van a beneficiar a EUA…
Total, la última es esta de que Trump siempre salió a corregir con el tema de los aranceles a los autos, basándose en eso que taaanto se dijo, de que los principales afectados serían las propias compañías americanas que arman sus carros en México, como Ford, Chrysler o General Motors…
Entonces, el presidente de EUA afirmó ayer que ya busca una forma de apoyar a las empresas automotrices de su país, ya que muchas de ellas están en proceso de trasladar su producción desde otros países como México y Canadá.
“Estoy considerando algo para ayudar a algunas compañías automotrices”, declaró Trump a los periodistas reunidos en el Despacho Oval.
“Necesitan un poco de tiempo porque van a fabricarlos aquí, pero necesitan un poco de tiempo. Así que estoy hablando de cosas así”, se limitó a decir… ¡Okeeey!
Perooo, a la par… ¡Que le pone un nuevo arancel al tomate mexicano!... Dijo Trump que desde el 14 de julio se aplicarán aranceles del 20.91% a ese producto proveniente de México, cancelando un acuerdo del 2019, que él mismo había puesto…
“Esta medida permitirá a los productores estadounidenses de tomates competir de forma justa en el mercado”, señaló mediante un comunicado del Departamento de Comercio…
Mire usted, aún faltan tres meses… Todo puede pasar en tres meses, como ya vimos con Trump… ¡Ufff!
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Le cuentan a Protágoras que a más de uno le sacó de onda ver a la Guardia Nacional dando rondines y haciendo preguntas a los paseantes en la Alameda durante la semana pasada y el fin de semana…
Y como no se sabía qué estaba pasando, pues hubo quienes pensaron que andaban tras un criminal de alto perfil o realizando algún megaoperativo. ¡Pos no!
Reeesulta que en Nuevo León —y en varios otros estados del país— la Guardia Nacional anda implementando recorridos preventivos y de proximidad social, sobre todo en plazas principales y zonas muy concurridas.
¿La tirada? Brindar seguridad, repartir el número de atención ciudadana (el 088, pa’ que lo apunten) y, sobre todo, generar confianza con la raza pa’ que se animen a denunciar cualquier ilícito.
O sea, quieren que la banda los vea como aliados… y no como soldados intimidantes. ¡Óoorale!
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Ya le salió ooootra polémica a la ciclovía de Alfonso Reyes en San Pedro… sí, la misma que la administración de Mauricio Fernández prometió eliminar desde 2024.
Reeesulta que en días pasados se viralizó un video donde un ciclista se vuela un semáforo en rojo y pedalea de forma errática, poniendo en jaque a los automovilistas que pasaban por ahí… ¡Sopas!
Y fue el exdiputado local Mauro Molano quien salió a ponerle nombre y apellido al tema, recordando que el Reglamento de Movilidad, Tránsito y Seguridad Vial es clarito: “los ciclistas también están obligados a respetar todas las señales de tránsito”. Punto.
Molano remató diciendo que este tipo de escenas ocurren “todos los días” en Alfonso Reyes, donde los conductores ya andan con un ojo al gato y otro al ciclista pa’ que no les toque un susto… ¡Plop!
Y es que sí: se vale exigir espacios seguros y respeto a los ciclistas… pero también a ellos les toca poner de su parte. Eso que ni qué.
¡¡Yássas!!