Mala señal que Adrián de la Garza delegue en Fernando Margáin los trabajos de transición para la alcaldía de Monterrey. Además de que el litigio electoral sigue su curso y podría haber sorpresas de nulidad, el nombramiento de Margáin, que ya prácticamente se apunta como próximo secretario del Ayuntamiento, refleja que las cuotas y prebendas partidistas, y no el profesionalismo de la administración pública, sigue campeando orondo en la capital de Nuevo León.
El debilitado PRI, arrollado por el alta suma de votos estatales por Movimiento Ciudadano, sólo tendría oportunidad de ser competitivo para la gubernatura con un perfil como el de César Garza Villarreal. Los demás nombres son polvo y humo, incluyendo a los panistas, sin figuras de renombre local.
Esto nos lleva a preguntarnos qué distingue a un buen gobierno actual, así sea en un municipio, estatal o federal: la transformación tecnológica que facilite las gestiones públicas al ciudadano.
Nombramiento curioso de Sheinbaum
Ayer, Claudia Sheinbaum anunció la creación de una Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones y nombró como su futuro titular a José Antonio Peña Merino, quien ya trabajó con ella en la Jefatura de Gobierno de CDMX. No es noticia nueva. Sheinbaum la anunció recientemente en su diálogo con la cúpula empresarial.
Sin embargo, no teniendo presupuesto de entrada y empalmando hasta ahora funciones con otras dependencias, la creación de esta agencia se prevé cuesta arriba. Si la intención es que Pepe Peña Merino se encargue de lanzar un nuevo satélite en 2027, ampliar la conectividad en México y ser responsable del espectro radioeléctrico, tendría que emitirse primero el decreto correspondiente, extinguiendo el actual Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) e incluso haciendo reformas constitucionales. De otra manera, las atribuciones y funciones de Pepe Merino serán meramente testimonial.
El tecnólogo detrás de Trump
La importancia en el próximo gabinete federal de Peña Marino reside en que si Donald Trump gana la presidencia en noviembre (hoy es su primer debate con Joe Biden, por cierto) el hombre de sus enteras confianzas en materia tecnológica es un joven de 34 años, genio informático que nadie tiene en el radar del análisis geopolítico: Jacob Helberg, quien sería el posible equivalente de Peña Merino en la Casa Blanca.
¿Por qué lo digo? Porque no hay fotografía de Trump con los CEO’s de empresas tecnológicas donde no lo acompañe Jacob Helberg, director ejecutivo de Palantir Technologies y (para mayores señas) uno de los principales promotores de sancionar y prohibir TikTok en EUA.
No dejes de seguirme para saber a fondo quién ganará el debate Biden vs Trump y qué hay detrás de la segunda tanda de nombramientos del gabinete de Claudia Sheinbaum que hoy ofrece a la prensa.
Antes de irme
Hablando de tecnólogos, resulta por demás extraño que en tanto ya recobró su libertad Julian Assange, fundador de WikiLeaks, un gran logro de la libertad de expresión, en el Código Penal de nuestro estado aún se mantenga el represivo y anticuado artículo 345, que establece la difamación como delito, atentando de esa manera contra la libertad de expresión y de prensa.
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