¿Daña a Nuevo León que Trump declare como grupos terroristas a los cárteles de la droga?

Donald Trump acaba de iniciar los trámites con su secretario de Estado, Marco Rubio, para que se declaren como grupos terroristas a los cárteles de la droga en México, porque amenazan la seguridad nacional en EUA, minutos después de asumir el cargo. Una ofensiva calificada por Trump como “la revolución del sentido común”. 

Para nuestros vecinos del Norte, el Cártel de Sinaloa, el CJNG, entre muchos otros, formarán parte de la lista de grupos terroristas, como Al Qaeda, ISIS, Hamás, Hezbolá y el Estado Islámico.  

El Congreso de EUA tendrá, a partir de hoy, siete días para deliberar al respecto. De publicarse la designación en el registro oficial, habrá serias sanciones y restricciones para México que impactarán, obviamente, también la soberanía de nuestro país y nuestro estado.  

Las 17 agencias de inteligencia secreta de EUA, entre las cuales están La CIA y la DEA (el FBI depende del Departamento de Justicia), oficializarán el espionaje y los operativos de inteligencia que siempre se hicieron de manera clandestina en nuestro país. (Yo fui el primer analista político que consignó ese espionaje clandestino desde el remoto año de 2000 en mi libro La transición: memorial del cambio político en México, que fue un éxito de ventas, pero extrañamente no fue reeditado). 

Tras la orden ejecutiva que ayer firmó el presidente número 47 de EUA, utilizando la Ley de Enemigos Extranjeros, esas labores de inteligencia las encabezará ahora el Departamento de Defensa, con un presupuesto mayúsculo de $884,000 millones de dólares. Para que te des una idea, la DEA maneja un presupuesto de $3,200 millones de dólares. El incremento de recursos que se invertirán en la “narcoguerra” será exponencial. 

¿Que nadie se engañe si supone que esta medida excepcional es beneficiosa para México y Nuevo León? Quién diga esto es un traidor a la patria. Un entreguista. 

¿Por qué? Simple: habrá congelación de cuentas de remesas y cuentas corporativas nuevoleonesas bajo la premisa de ser sospechosas de lavado de dinero. Los litigios estarán a la orden del día, perdiendo tiempo y dinero. Eso puede hacer incurrir unilateralmente a EUA en prácticas de comercio desleal, disfrazadas de supuesto combate al narcotráfico, sobre todo porque el nuevo secretario de Defensa de Trump, Peter Hegseth (acusado, por cierto, de delitos sexuales y conducta impropia), ha dicho que podría incluso emprender una intervención militar en México. Y no olvidemos que entre los estados fronterizos en riesgo estaría, de manera inmediata, Nuevo León. 

Así que estemos alerta con la “palestinización” de la frontera mexicana. No dejemos que eso llegue a pasar porque podría haber conatos de levantamientos armados, sobre todo en Chiapas, Guerrero y Michoacán. 

Ahora bien, habría que añadir a eso la orden ejecutiva de Trump de declarar emergencia nacional en su frontera sur (Trump nos llamó “invasores” y ya canceló la denominada “Frontera abierta”), con lo cual movilizará tropas a estados como Texas y reactivará de forma inmediata el programa Quédate en México, por el cual 80,000 migrantes que aspiraban a entrar a EUA esperaban varios meses en territorio mexicano mientras su situación migratoria se desahogaba en tribunales.

Miles de migrantes que pretenden entrar legalmente a EUA se quedarán indefinidamente en estados como Nuevo León. Los migrantes que a partir de hoy ingresen de forma irregular a EUA serán “detenidos y deportados de inmediato. Regresaremos a millones y millones de personas a los países desde donde llegaron”, amenazó Trump, destruyendo de un plumazo la política conocida como Catch & Release. 

Ayer mismo se suspendió, sin previo aviso, la aplicación CBT One, con un millón de citas esperadas por migrantes para pasar de México a EUA. 

¿Qué haremos con ese millón de centroamericanos varados en nuestra frontera? ¿Qué haremos con nuestras casas migrantes de Nuevo León, que a duras penas sobreviven? 

Hay más de 650 migrantes nada más en albergues “oficiales” en Nuevo León, esperando utópicamente que les aprueben el trámite de acceso. 

¿Qué haremos los nuevoleonenses con ellos, junto con los demás que nos manden deportados en las próximas semanas? 

Sin embargo, tanto Stephen Miller, asesor de Trump, como Kristi Noem, directora de Seguridad Nacional, saben bien que deportar a 11 millones de migrantes de EUA a México, costaría alrededor de  $300,000 millones de dólares; una cantidad exorbitante, sobre todo para un país como EUA con una inflación de 2.9%, marcando tres meses de repunte significativo, y eso sin contar con las demandas que se impondrán masivamente en tribunales. 

Otra ventaja es que, al menos en su discurso de juramentación en el Capitolio, Trump no tocó el tema de la imposición del 25% de aranceles a los productos mexicanos. Algo es algo. 

Es decir, sin cantar victoria, pero no todo pinta tan mal para México y menos para Nuevo León. La inversión Extranjera Directa, gracias al nearshoring, que en 2024 rebasó en nuestra entidad nuevoleonesa los $70,000 millones de dólares, y consiguió generar más de 260 mil nuevos empleos en nuestra entidad, seguirán llegando. 

Si, como dice Trump, con su segundo mandato iniciará una nueva etapa de oro para EUA, podría tener razón, siempre y cuando aclare que ese oro es el que gastará en órdenes ejecutivas, como la declaración de emergencia nacional en la frontera sur, y podría provocar un grave desequilibro en su balanza comercial. Al tiempo.