¿Cómo afectaría Trump a Nuevo León si declara terroristas a los cárteles mexicanos?

Donald Trump advirtió ayer que, en su primer día en el Despacho Oval, cuando asuma el cargo de presidente de EUA, declarará a los cárteles del narco mexicano como organizaciones terroristas.  

“Designaré inmediatamente a los cárteles del narcotráfico como grupos terroristas extranjeros. Lo haré de inmediato”.

Lo dijo en el foro de la Turning Point, asociación ultraconservadora en Phoenix (Arizona) cuya misión es propagar los principios de MAGA (Make American Great Again, hagamos grande de nuevo a Estados Unidos) en los campus universitarios de su país.

Subrayo en especial un párrafo que me resulta clave en el mensaje de Trump: “Desataré el poder de las fuerzas de seguridad federales: el ICE, la Patrulla Fronteriza, la agencia de narcóticos DEA, la comunidad de inteligencia e impondré sanciones financieras para expulsar a las bandas criminales migrantes que asesinan, violan y mutilan a nuestros ciudadanos”.

“Nos desharemos de ellos, deportaremos, desmantelaremos y destruiremos esa red que opera ilegalmente en suelo estadounidense”. 
¿Cuál es el problema para estados fronterizos con EUA como Nuevo León? Que estamos más expuestos a la desestabilización económica y política si Trump cumple su amenaza. Y parece ser que no hay reversa en su decisión.

¿Por qué afectaría a Nuevo León esta controvertida política pública de Trump? Primero, por la oleada de migrantes expulsados que recibiríamos en nuestro territorio local. Basta con que sean unos cuantos miles de expulsados para colapsar a nuestra entidad.

Es cierto que la violencia del narcotráfico ha afectado profundamente la economía local, reduciendo la inversión y aumentando la inflación. Y es cierto que, en México, la criminalidad agrega dos puntos porcentuales a la inflación, y cada mexicano experimenta una pérdida económica promedio de $ 35,705 pesos al año. Sin embargo, congelar cuentas bancarias de origen mexicano que sean sospechosas de lavado de dinero es de una dificultad alarmante. 

Acabaría por hacer volar por los aires las remesas y el manejo financiero de las relaciones comerciales.

El crimen organizado está más entreverado en la economía mexicana y nuevoleonesa de lo que parece. No es que los buenos estén de un lado y los malos del otro. Es como la metástasis de un cáncer que no se cura extirpando un órgano determinado.

Y lo peor: sería una invitación al injerencismo de EUA en México. Y siempre que EUA se mete a perseguir enemigos públicos declarados en suelo extranjero, patea un avispero. ¿Ejemplo? Hay decenas: Vietnam, Afganistán, o apoyando tácitamente la invasión de pueblos, como en Gaza y Cisjordania.

La amenaza de una invasión es la amenaza del fin del comercio regional.

¿Acabaría con los miles de centrales de distribución de droga que existen en territorio norteamericano? ¿Por qué no hay ningún operativo de esta naturaleza? ¿Hay un estado profundo (Deep State) que gobierna en las sombras de EUA y que, para no tocarlo, se prefiere recurrir a medios intervencionistas? Sí. 
Así ha sucedido a nivel regional desde hace décadas.

El próximo secretario de Estado de Trump, Marco Rubio (53 años), ha exigido como senador que se clasifique a organizaciones como el Cártel de Sinaloa o el Cártel de Jalisco Nueva Generación como terroristas, bajo la misma denominación usada para el Estado Islámico (ISIS) en Oriente Próximo.

¿Ataques selectivos con drones o misiles de largo alcance para aniquilar esas organizaciones, en contra del Derecho Internacional, dejando una grave crisis en la región?

Estemos alerta, los nuevoleoneses, y no descartemos medidas extraordinarias contra este panorama peligroso para nuestras familias.