El viernes 28 de junio fui invitado a participar en la Cumbre Mundial de Comunicación Política que se llevó a cabo aquí en la ciudad de Monterrey, con la conferencia Romper los mitos.
Ante un público de especialistas de la comunicación política, estrategas y políticos, compartí el mensaje con el que Judith y yo convencimos a más de 800,000 nuevoleoneses a que votaran por nosotros: la unión a través del trabajo.
Pero sobre todo, expuse que esta campaña se trató de romper mitos. Particularmente, cinco:
1. “El candidato no se mete en la estrategia”.
2. “La 4T es incompatible con el electorado nuevoleonés”.
3. “Necesitas ser un influencer o un apellido para ganar una elección”.
4. “En Nuevo León se opta por el ‘voto cruzado’”.
5. “Las encuestas no se equivocan”.
Desde el día uno Judith y yo participamos en todas las decisiones creativas de la campaña. Para nosotros era muy importante asegurar que cada mensaje reflejara nuestros valores y se sintiera auténtico para los ciudadanos de Nuevo León, y no una campaña de mercadotecnia más.
En segundo lugar, desmentí rotundamente la idea de que la 4T es incompatible con el electorado nuevoleonés. Basado en datos reales y en el palpitar de la ciudadanía, mostré cómo abrazar esta identidad política fue esencial para conectar con las aspiraciones de cambio y transformación del estado.
Además, desafié el mito de que se necesita ser una figura mediática o tener un apellido influyente para ganar una elección. Demostré que la honestidad, la trayectoria y los resultados tangibles son mucho más determinantes para el éxito electoral que cualquier otra consideración superficial.
Lo anterior no fue fácil en un contexto electoral en el que no hubo realmente debates entre los candidatos al Senado y los poquísimos que existieron fueron con formatos acartonados que parecían más exposiciones que contraste de ideas, casi con el objetivo de proteger al candidato favorito de ciertos intereses.
En cuanto al voto cruzado, explicamos cómo nuestra narrativa estratégica fue diseñada para alinear los intereses legislativos con el proyecto presidencial, construyendo así un apoyo coherente y estratégico desde las bases.
Finalmente, cuestioné la infalibilidad de las encuestas convencionales que más que muestras de realidad se han convertido en herramientas publicitarias y lo importante que fue para nosotros crear nuestras propias mediciones.
Sobre la estrategia de comunicación dejé claro que la parte digital fue fundamental y en ello destaqué el uso innovador de la nano segmentación avanzada por parte de Boxplot, que nos permitió una comunicación precisa y efectiva, alejada de las manipulaciones publicitarias.
Pero, a diferencia de los demás, nosotros entendimos que la tierra es igual de importante. Para Judith y yo, que hemos hecho nuestra carrera política en la calle y casa por casa, era fundamental que nuestra campaña al Senado también fuera así.
Terminé la conferencia igual que como la inicié, agradeciendo a mi equipo. Nosotros fuimos la cara de la campaña y eran nuestros nombres en la boleta, pero detrás estuvo todo un grupo de personas que construyó día con día nuestro triunfo. A mis asesores Boxplot; Gabarrot y Asociados; y Marca al Aire Publicidad, a los brigadistas que nos acompañaron siempre y a todos los que permanecieron con nosotros 90 días de mucho trabajo, gracias.
Está elección fue histórica en Nuevo León en muchos sentidos, pero creo que sobre todo se rompieron mitos alrededor de la Cuarta Transformación. Con nuestro triunfo en el Senado estoy seguro que la 4T llegó al estado para quedarse y florecer, por el bien de todos.