Sin clases, menos autos ¡y se dispara la contaminación!

A pesar de que aún es temporada de vacaciones y que con ello baja la cantidad de vehículos que transitan por la ciudad, la calidad del aire en la metrópoli regia ayer registró niveles de mala y muy mala, según el reporte emitido por el Sistema de Integral de Monitoreo Ambiental (SIMA).  

Durante la mañana, de las 15 estaciones, 12 estuvieron con la etiqueta color naranja, las cuales advirtieron que la calidad del aire es mala, mientras que otras tres estaciones marcaron la etiqueta amarilla que corresponde a regular.  

La estación de monitoreo que se ubica en Apodaca fue la que, con corte a las 11:00 horas de ayer, contaba con el nivel más elevado de contaminantes, al registrar 189 microgramos por metro cúbico (μg/m3) de PM10.

Le siguieron las estaciones de Cadereyta, Pesquería, Juárez, Guadalupe, Sur, Centro, San Nicolás, Escobedo, Santa Catarina y las dos que se ubican en García.  

Las estaciones que estuvieron en amarillo fueron las que se ubican en San Nicolás, Monterey y San Pedro.  

Ayer, la Secretaría de Medio Ambiente emitió un comunicado en el que advirtió que, dados los fuertes vientos, tolvaneras y polvo proveniente de Estados Unidos propiciarían condiciones para que se elevara material particulado en la atmósfera.

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) alertó que la intensidad de las ráfagas de viento podría llegar hasta los 90 kilómetros por hora en Nuevo León.

Por la noche de ayer, el Sistema Integral de Monitoreo Ambiental (SIMA) reportó una muy mala calidad del aire en la zona metropolitana de Monterrey.
 
Advierten riesgo de incendios

Debido a la presencia de tolvaneras en la metrópoli regia por fuertes vientos, el estado exhortó a fuentes emisoras federales, estatales y municipales a suspender operaciones en la medida de
lo posible.

Mediante un comunicado emitido por la Secretaría de Medio Ambiente, se informó que los fuertes vientos aumentan partículas en el ambiente y que esto se genera debido a la entrada del frente frío 43.

Los vientos que se presentan se explican en el documento, tienen una velocidad promedio de entre 25 a 45 kilómetros por hora, elevando la concentración de particulado conocido como PM10.

“Por el ingreso de polvo proveniente del noreste de México y del sur de Estados Unidos y suspensión de polvo local.

“Adicionalmente, hay muy baja humedad relativa, lo que mantiene condiciones propicias para incendios”, indica el comunicado.

Cómo parte de la fase preventiva, la dependencia estatal enlistó las siguientes recomendaciones a fuentes emisores federales como la refinería de Pemex en Cadereyta, así como empresas privadas cuya inspección está adscrita a la Federación como Ternium, Iberdrola y Cemex.

Además de fuentes emisoras estatales y municipales, en las que entran las empresas locales como pedreras y emisiones no fijas como los vehículos.

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