Marca tragedias de penales a sexenio estatal: Suman 79 muertos
Penales son la gran deuda del estado y afirman que no hay estrategia para mejorar la situación
- 05
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Enero
2018
Ciudadanos en Apoyo a los Derechos Humanos (CADHAC) afirmó que el Estado no muestra voluntad de controlar el desgobierno que pervive en los tres penales los cuales han dejado una estela de muerte
Los motines, enfrentamientos y asesinatos en los tres penales del Estado son el sello del sexenio actual: prueba de ello es que hasta el momento suman 79 fallecidos.
El último hecho del 2017 fue la revuelta de octubre del Penal de Cadereyta que, oficialmente, dejó 17 muertos mientras que el 2018 inició con el ahorcamiento de un expolicía de Escobedo quien estaba en el Topo Chico acusado de secuestrar y matar a un empresario y su secretaria.
No podemos permitir que haya ni una muerte más, de ninguna interna, de ningún interno, y estamos viendo, nuevamente, que el gobierno no asume la responsabilidad que le corresponde de tener la tutela de los centros penitenciarios.
No hay un control, están dejando que sigan cometiéndose ilícitos, que sigan cometiéndose asesinatos, afirmó la integrante de CADHAC, Liz Sanchez Reyna.
Según el organismo, lejos de aprender de estos hechos que incluso son conocidos y repudiados internacionalmente, el gobierno de Nuevo León no ha enderezado el camino.
Estos hechos son de los más graves que han ocurrido en América Latina y, por supuesto que es una preocupación el tema penitenciario para organismos internacionales como ya lo ha dicho la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la Organización de Naciones Unidas.
Está ahí el foco puesto en Nuevo León porque lo que está ocurriendo en los centros penitenciarios no debe ocurrir, el gobierno se está mostrando ineficiente, indicó Sánchez.
CADHAC afirma que no ve una estrategia de mejora sino que, al contrario, el Estado le quitó 21.5 millones de pesos al presupuesto del Topo Chico.
Al final los centros penitenciarios son un reflejo de lo que pasa en la sociedad, no hay un control por parte del Estado y estos nos muestra que no hay un control, en general, de garantizar los derechos y de eliminar o de disminuir la violencia que hay en Nuevo León, expresó la activista.
Aparte del de octubre pasado del que CADHAC duda que solo hayan sido 17 fallecidos, el otro hecho más grave es el motín del Topo Chico de febrero del 2016 donde fallecieron 49 personas.
Sobre el último hecho, lo óptimo, sostiene el organismo, es que se realice una investigación seria para saber quién y por qué mató al expolicía.
Hablamos de 78 personas asesinadas en este periodo de Jaime Rodríguez aunque puede ser más, ya lo hemos dicho en otros momentos, CADHAC, lo que pasó en octubre en el Penal de Cadereyta, expresó.
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