
Alerta experto por efectos del polvo en el ambiente
El especialista David Román Cañamar afirmó que días con fuertes tolvaneras elevan hasta 40% las enfermedades respiratorias
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Marzo
2025
Si usted siente que en estos días, por más que descanse y tome antigripales, las flemas y sus efectos no se van, lo más seguro es que sea por el abundante polvo que hay en el ambiente —y que llegó a Nuevo León en una “nube”, recientemente— el cual provoca que al inhalarlo, el aparato respiratorio se inflame de más y no termine por recuperarse.
Pero lo más grave es que la exposición crónica al polvo o partículas como las PM2.5 o PM10 puede traducirse en una infección del aparato respiratorio, después en una alergia crónica y a la larga puede predisponer al organismo para desarrollar una enfermedad como el cáncer de pulmón o senos paranasales.
El especialista en inmunología clínica y alergias de Christus Muguerza Hospital Sur, David Román Cañamar, le dijo a El Horizonte que no hay estudios que comprueben que el polvo provoca cáncer directamente, pero sí puede contribuir a ello porque, al igual que la obesidad y el estrés, inflama partes del organismo de manera crónica y eso da pie al desarrollo de esos padecimientos graves.
“Sabemos que también un cáncer y los tumores son procesos inflamatorios; sí se ha visto una alza muy importante de esto y de enfermedades reumáticas y debe haber una relación. Dentro de toda la inmunología, debe de haber una relación de esos estados inflamatorios crónicos del cuerpo con el desarrollo de enfermedades malignas y reumáticas incluso, autoinmunes".
“Lo va predisponiendo (al organismo), es, como por ejemplo, el estrés es un estado proinflamatorio, la obesidad es un estado proinflamatorio. Entonces, sí sabemos eso, sabemos que todos los estados proinflamatorios que mantienen al cuerpo en un estado de inflamación crónica y persistente día a día, con el paso de los años son personas que terminan desarrollando este tipo de enfermedades, cáncer, reumáticas”, indicó.
El experto señaló que, según mediciones, la presencia prolongada de polvo provoca una alza de hasta 40% en enfermedades del aparato respiratorio.
Detalló que los primeros síntomas se manifiestan con la generación de moco, que es una respuesta natural del organismo para defenderse del ingreso de alérgenos.
“A veces no lo vemos, pero la nariz empieza a responder con congestión, con producción de moco y flema más espesa en la intención de protegerse de este moco y en respuesta al proceso inflamatorio que se está generando en toda la mucosa respiratoria de nariz, senos paranasales e incluso a nivel pulmonar".
“Hay estudios que también han demostrado que todas estas partículas, sobre todo las de 2.5 micras, absorben y entran al torrente sanguíneo, generando ya procesos, pues de inflamación y sintomatología, a nivel neurológico, a nivel cerebro”, señaló.
El pasado miércoles y jueves, la zona metropolitana de Monterrey mantuvo activa una contingencia ambiental por la llegada de una masa de polvo proveniente de Texas y Coahuila.
Esto provocó que el estado ordenara la suspensión de industrias como las pedreras y suspendiera las actividades al aire libre de los niños.
“Te puedo mencionar que hay algunos estudios que han demostrado que, por ejemplo, niños que viven cerca de avenidas principales o que sus escuelas están cerca de calles y avenidas principales tienen mayor predisposición al desarrollo de alergia y eso se explica, por lo mismo, están más cercanos a las partículas, al material particulado que genera una inflamación respiratoria y que permite la entrada de polenes y alérgenos y subsecuentemente el desarrollo de alergia”, dijo Román Cañamar.
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