El embajador Ken Salazar se despide con frase polémica

El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, se despidió ayer de su cargo, destacando la cooperación binacional que impulsó durante su gestión entre ambos países. 

Expresó que no se arrepiente de lo que hizo, además que declaró que hay fentanilo en México y se produce en el país. En su residencia en Lomas de Chapultepec, Salazar declaró que “la misión nunca se cumple, el trabajo sigue”.

 “Sé lo que pasa, que hay fentanilo en México y también sé que se produce acá. Pero eso es un debate, que se produce o no se produce no nos lleva a donde tenemos que ir.

Afirmó que siempre hubo coordinación y comunicación con México, y aseguró no arrepentirse de sus polémicas declaraciones sobre temas como la reforma judicial y la estrategia de seguridad. 

“No me arrepiento de nada. Me voy mejor, sintiéndome que llevamos un trabajo fuerte y bueno, que se debía llevar entre los dos países con más frecuencia”, respondió cuando se le preguntó si se arrepentía de las tensiones que hubi con México tras sus declaraciones sobre la reforma judicial.

El embajador además añadió: “Yo le tengo mucho respeto a la gente mexicana y a la soberanía de México. Le tengo un respeto grande, como siempre, a Andrés Manuel López Obrador y también a la presidenta Claudia Sheinbaum.

Entonces, yo les deseo todo lo mejor, las opiniones mías... y espero que en los cinco años, nueve meses que le faltan a la Presidenta Sheinbaum, le deseo... bueno, me voy sintiéndome que dejamos un trabajo fuerte”.

El diplomático estadounidense se despidió oficialmente de su cargo en una reunión con la prensa en la residencia oficial de la Embajada de Estados Unidos en México.

Durante su intervención, presentó a Mark Johnson, quien asumirá el puesto de encargado de negocios mientras llega el próximo embajador.

Salazar explicó que Mark Johnson, quien cuenta con más de 20 años de experiencia en el servicio diplomático, es una figura conocida en México- Johnson desempeñó el cargo de portavoz de la Embajada hace aproximadamente una década y ahora tendrá la tarea de dar continuidad a los trabajos diplomáticos entre ambas naciones hasta la llegada del nuevo titular.

En su mensaje de despedida, a pregunta expresa de si sentía que se iba con la tarea cumplida, Ken Salazar evitó afirmar que había completado su misión tras señalar que el trabajo continúa.

Sin embargo, dijo que sentía orgullo por su labor al frente de la Embajada de Estados Unidos en México y destacó los logros alcanzados en áreas clave como la prosperidad económica, la seguridad compartida, la migración y la relación cultural entre los dos países.

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