Acusa Sheinbaum a Romero de ser 'jefe del Cártel Inmobiliario'

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, acusó este lunes al recién elegido dirigente nacional del Partido Acción Nacional (PAN), Jorge Romero, de casos de corrupción y de ser "jefe" del denominado “Cártel Inmobiliario”.

Sheinbaum leyó un fragmento del libro "Decisiones Difíciles", escrito por el expresidente Felipe Calderón, en el que se mencionan prácticas corruptas de Romero durante su gestión como delegado en la alcaldía Benito Juárez de la Ciudad de México. 

El fragmento leído por Sheinbaum señala que Romero, conocido por los casos de corrupción en esa alcaldía, habría obtenido ganancias de hasta 7 millones de pesos al mes a través de asociaciones de ambulantes y otros grupos, además de infiltrar el padrón del PAN en la capital.

Tras la lectura, Sheinbaum expresó que esa es su opinión sobre el nuevo dirigente panista, en respuesta a la reciente elección de Romero como líder nacional del partido.

La presidenta también acusó a los diputados del PAN de votar en contra de la elevación a rango constitucional de los programas sociales del Bienestar. En su intervención, destacó que el grupo que ha llegado a la dirigencia del PAN tiene un historial de corrupción, especialmente asociado con la alcaldía Benito Juárez.

Aseguró que en esa demarcación se construyeron numerosos edificios que violaban los usos de suelo, con pisos adicionales que no fueron autorizados por las autoridades, lo que impedía a los propietarios de departamentos escriturarlos.

Sheinbaum detalló que los constructores de estos edificios solían pagar al alcalde o delegado de turno para permitirles sobrepasar los límites de construcción. Explicó que, tras las investigaciones, uno de los detenidos reveló cómo funcionaba este esquema de corrupción, el cual fue denominado el "Cártel Inmobiliario".

Elección del nuevo dirigente del PAN

En el ámbito electoral, Jorge Romero fue elegido nuevo dirigente nacional del PAN con un amplio respaldo, obteniendo 96,533 votos, lo que representó el 79.9% de los sufragios. La elección se llevó a cabo con una participación del 45% del padrón panista, con 120,848 votos registrados.

Aunque la candidata rival, Adriana Dávila, reconoció la victoria de Romero, también expresó dudas sobre la legitimidad del proceso, señalando que hubo irregularidades y violaciones a la legalidad en la elección.

Romero, por su parte, celebró su triunfo y ofreció disculpas por los errores cometidos por su partido. Aseguró que su prioridad será reconstruir el PAN y recuperar la confianza de los militantes, invitando a Dávila a unirse a su equipo para trabajar en la renovación del partido.