Venezuela: estallan protestas entre dudas por victoria de Maduro

Este lunes estallaron protestas en varias ciudades venezolanas después de que el líder autoritario Nicolás Maduro fuera declarado formalmente ganador por la autoridad electoral del país en una carrera presidencial empañada por acusaciones de fraude electoral.

En Caracas, la capital, los manifestantes bloquearon las calles y cientos de personas más fueron vistas caminando por una calle principal golpeando cacerolas en protesta contra la victoria de Maduro el domingo. En la principal base militar de la ciudad, donde vive Maduro, se vio a gente prendiendo fuego a los carteles electorales del dictador.

También se reportaron protestas en otras ciudades, incluida Maracay, donde la activista opositora Esthefania Natera dijo a CNN que la gente estaba en las calles “para gritar y exigir que se diga la verdad porque conocemos los resultados reales”. 
Dijo que la policía estaba usando gases lacrimógenos contra los manifestantes pacíficos. En el estado costero de Falcón, los manifestantes derribaron una estatua de Maduro, según mostró un video en las redes sociales.

Las próximas 24 horas serán clave para ver cómo responde Maduro a las acusaciones en su contra. Los analistas dicen que podría haber una nueva ola de disturbios en el país si hay protestas generalizadas contra el régimen.

Las manifestaciones callejeras de los años anteriores fueron aplastadas por el ejército del país, que ha apoyado durante mucho tiempo a Maduro y a su predecesor, el fallecido Hugo Chávez.

Maduro sonrió al ingresar al Consejo Nacional Electoral (CNE) antes de la ceremonia del lunes en la que fue declarado ganador, recibiendo vítores y felicitaciones de muchos de los presentes. El CNE, que está repleto de aliados de Maduro, aún no ha publicado los resultados finales de las elecciones del domingo.
“¡Venezuela tiene el mejor sistema electoral del mundo!”, anunció el presidente del CNE, Elvis Amoroso, antes de proceder al anuncio formal.

Sin embargo, la votación estuvo plagada de denuncias de irregularidades, como la denegación del acceso a la sede del Consejo Nacional Electoral (CNE) a testigos de la oposición mientras se contaban los votos y la presuntamente impidió que se procesaran más votos.