Israel bombardea suburbios de Beirut tras ataques de Hezbolá

Israel lanzó un inusual ataque aéreo que mató a un jefe militar de Hezbolá en un vecindario densamente poblado de Beirut este viernes, dijo el ejército israelí. Fue el peor bombardeo contra la capital de Líbano en años. Las autoridades informaron de al menos 12 muertos y decenas de heridos.

El portavoz del ejército israelí, el contralmirante Daniel Hagari, dijo que el ataque en el distrito de Dahiya, en el sur de Beirut, tuvo como objetivo y mató a Ibrahim Akil, comandante de la Fuerza Radwan de élite de Hezbolá, así como a otros 10 operativos del grupo armado libanés.

Hezbolá no confirmó si falleció Akil en el ataque, el cual se produjo en medio de una oleada de bombardeos entre el grupo miliciano e Israel que aumenta los temores de que estalle una guerra total en Oriente Medio.

Las fuerzas militares israelíes no dieron más detalles sobre las identidades de los otros comandantes presuntamente muertos en el ataque. El Ministerio de Salud de Líbano dijo que al menos 12 personas murieron y 66 resultaron heridas.

No estaba claro de inmediato si la cifra de muertos del ministerio incluía a Akil. 

Nueve de los heridos estaban en estado grave, agregó el ministerio.

Un funcionario de Hezbolá, que habló bajo condición de anonimato confirmó que al parecer Akil estaba en el edificio cuando fue atacado, pero no dio más detalles. Akil es jefe de la Fuerza Radwan de élite de Hezbolá y del Consejo de la Yihad, el más alto organismo militar del grupo. 

Estados Unidos lo sancionó por su presunto papel en dos atentados en 1983 contra la embajada estadounidense en Beirut y en el Cuartel del Cuerpo de Marines de Estados Unidos que dejaron más de 300 muertos.

El ataque contra los poblados suburbios del sur de Beirut se produjo durante la hora pico, cuando la gente se dirigía a casa desde el trabajo y los niños salían de la escuela. Las cadenas locales transmitieron imágenes que mostraban al menos dos edificios completamente colapsados y la calle principal devastada en Dahiyeh, la extensa zona a pocos kilómetros del centro de Beirut donde Hezbolá tiene el poder.

“El ataque en el Líbano es para proteger a Israel”, dijo Hagari en una conferencia de prensa, describiendo a Akil como uno de los miembros de Hezbolá responsables del disparo frecuente de cohetes del grupo hacia Israel.

Horas antes del ataque, Hezbolá bombardeó el norte de Israel con 140 cohetes y mientras la región esperaba la venganza prometida por su líder, Hassan Nasrallah, por el extenso ataque ejecutado con 'beepers' y 'walkie-talkies' pertenecientes a miembros del grupo armado libanés.

Hezbolá dijo que sus ataques habían impactado varios sitios en la frontera con cohetes Katyusha, incluidas varias bases de defensa aérea, así como el cuartel general de una brigada blindada israelí que dijeron haber atacado por primera vez.

El ejército israelí dijo que se lanzaron 120 misiles contra zonas de los Altos del Golán, Safed y la Alta Galilea, algunos de los cuales fueron interceptados. Los bomberos estaban trabajando para extinguir los incendios provocados por los escombros que cayeron al suelo en varias zonas, dijo el ejército.

El ejército no dijo si algún misil había alcanzado objetivos o causado víctimas.
Otros 20 misiles fueron lanzados contra las zonas de Merón y Netu’a y la mayoría cayeron en espacios abiertos, dijeron las fuerzas militares y añadieron que no se habían reportado heridos.

El ejército israelí también ordenó a los residentes de algunas zonas de los Altos del Golán y del norte de Israel que evitaran las reuniones públicas, minimizaran los desplazamientos y permanecieran cerca de los refugios en previsión del lanzamiento de cohetes que finalmente se produjo el viernes.

Hezbolá e Israel han estado intercambiando ataques casi a diario desde el 8 de octubre, un día después del atentado de Hamás en el sur de Israel que desencadenó la guerra en la Franja de Gaza. Sin embargo, la andanada de cohetes del viernes fue más intensa de lo normal.

La última vez que Israel atacó Beirut fue en un bombardeo en julio que mató al líder de Hezbolá, Fuad Shukr.

En declaraciones a los periodistas, Hagari describió tanto a Shukr como a Akil como dos oficiales militares más cercanos al líder de Hezbolá, Nasrallah.

Mientras tanto, en Gaza las autoridades palestinas dijeron que 15 personas, incluidos niños, murieron en múltiples ataques israelíes en la Franja de Gaza.

Israel sostiene que únicamente ataca a los milicianos y acusa a Hamás y a otros grupos armados de poner en peligro a los civiles al operar en zonas habitadas.

El Ministerio de Salud de Gaza dice que más de 41.000 palestinos han muerto en el territorio desde el ataque de Hamás en Israel el 7 de octubre. El ministerio no diferencia entre combatientes y civiles en su recuento, pero dice que poco más de la mitad de los muertos son mujeres y niños.

La guerra ha desplazado a un 90% de los 2,3 millones de habitantes de Gaza.