Argentina: Habrá fuerte ajuste por inflación, pobreza y recesión

En medio de la expectativa de los mercados, el gobierno del presidente argentino Javier Milei anunciará el martes una batería de medidas económicas y reformas del Estado para reducir el déficit fiscal y enderezar la economía que supondrán un doloroso ajuste en una sociedad golpeada por la inflación y una lacerante pobreza.

La inflación es de más de 142% anual y los economistas privados estiman que el año terminará con un alza del costo de vida de alrededor de 188%.

Milei ha indicado que la inflación “viaja a un ritmo de entre 20% y 40% mensual para los meses entre diciembre y febrero” y que las medidas que se van a anunciar apuntan a evitar una hiperinflación.

La pobreza ha crecido y en el primer semestre del año alcanzó a 40.1% de la población de más de 47 millones de personas. En tanto, la indigencia afecta al 9.3%, según los últimos cálculos oficiales.

Sin embargo, el reconocido Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina indicó recientemente que la pobreza alcanzó el 44.7% en el tercer trimestre del año.

Por otro lado, se prevé que la actividad económica del país sudamericano se contraiga en 2023 más que la de cualquier otro de Latinoamérica. Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Producto Bruto Interno (PBI) tendrá una retracción del 2.5%, por debajo del crecimiento del 5% registrado en 2022.

El fuerte desequilibrio de los ingresos y egresos es una de las máximas preocupaciones. Milei dijo que de 15 puntos del déficit fiscal, cinco corresponden al Tesoro Nacional y 10 al Banco Central” y que “la solución implica un ajuste fiscal en el sector público nacional de cinco puntos del PBI”.

En tanto, la deuda externa del sector privado de Argentina se situó en junio en algo más de 93 mil 400 millones de dólares, continuando la tendencia alcista que ya lleva más de una década. El país mantiene un pasivo con el FMI de unos 45 mil millones de dólares que en el último año intentó refinanciar en términos más beneficiosos.

En el mercado cambiario subsisten las restricciones para la compra de divisas, la operatoria con distintos dólares según la actividad y el atraso cambiario. El dólar oficial cotizaba el martes a unos 462 pesos por unidad, mientras que el dólar del mercado paralelo, donde no existen límites para su adquisición, lo hacía a 1,010 pesos. De esta forma, la variación situaba la brecha entre ambos en más de 118%.