Presupuesto 2025 llegaría a casi $10 billones de pesos

Ante a una mayor necesidad de obra pública e infraestructura derivada del crecimiento y desarrollo económico que hoy tiene México, se prevé que el Presupuesto 2025 del gobierno federal alcance cifras históricas.

De acuerdo con un análisis efectuado por El Horizonte, en donde se evaluaron las tendencias registradas en años pasados y el escenario actual, el paquete que presentará el gobierno federal al cierre de esta semana podría estar rondando los $10 billones de pesos.

El monto se colocaría 10.4% por encima de los $9.066 billones de pesos presupuestados para este año, según datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

Como se recordará, en el primer año del presidente Andrés Manuel López Obrador, se presentó un presupuesto (para 2019) por $5.814 billones de pesos, lo que significa que ahora sería 70% mayor que hace un sexenio.

Incluso en el gobierno anterior la apuesta se centró en obras insignia como el Tren Maya, pero ahora todo apunta a que se apoyaría con mayores recursos a toda la infraestructura necesaria para el desarrollo y aprovechamiento del nearshoring.

Según analistas y empresarios consultados, la mayor apuesta de recursos para el primer año del gobierno liderado por Claudia Sheinbaum debería ir enfocada a rubros como carreteras, logístico, el tema hídrico y energía.

Alejandro Malagón, presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) destacó la necesidad de invertir más en obras.

“Debemos estar incrementando la inversión pública a 5% del Producto Interno Bruto (PIB), alrededor de $1.2 billones de pesos.

En unos días la presidenta de México enviará al Congreso de la Unión el Paquete Económico para 2025. Reconociendo las rigideces del presupuesto y el sentido de responsabilidad hacendaria, nos preocupa que la anunciada reducción del déficit público de 5.9% a 3.5% del PIB signifique una reducción de la inversión pública en infraestructura estratégica”, explicó.

Por ello, agregó, “es crucial los montos crecientes en carreteras, vías férreas, aeropuertos, infraestructura energética, salud, movilidad”.

Reiteró que su propuesta como organismo va encaminada a implementar mecanismos transparentes y eficientes de inversión pública-privada, así como esquemas financieros innovadores que “nos permitan hacer realidad las grandes obras que el nearshoring y la sociedad reclaman”.

Aunado a ello, Roberto Macias, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) Nuevo León, dijo que hay confianza para que en el presupuesto federal del próximo año se consideren proyectos hídricos y de movilidad que ellos plantearon al gobierno.

“Esperamos que el recurso alcance lo mínimo que piden los estándares internacionales en inversión en infraestructura y que es de 5% o 6% del PIB”, refirió.

También opinó que debe haber un trato justo para la entidad, y confió en que habrá un manejo y planteamiento responsable para el presupuesto.

“Históricamente somos el estado que más aporta al PIB de la construcción y en el PEF normalmente nos ubicamos a mitad de la tabla de participaciones. Este año, la Federación destinó a Nuevo León para obra pública $5 mil millones 831 millones de pesos”, indicó.

A su vez, Luis Alberto Moreno Gómez Monroy, presidente nacional de la Cámara Nacional de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi) dijo que el paquete para 2025 debe incluir un monto específico para subsidios de vivienda.

“Creemos que para el primer año 2025 con $2,500 o $3,000 millones de pesos es el arranque perfecto para el otorgamiento de subsidios de vivienda para personas de menores ingresos. En la parte de infraestructura debemos pensar en trabajos en el tema hídrico y en energía, en 40 ciudades del país hay problemas hídricos”, subrayó.

De forma paralela, Miguel Ángel Martínez Millar, presidente nacional de la Cámara Nacional de Autotransporte de Carga (Canacar) dijo que es necesario que se apueste a obras carreteras que ayuden a mejorar la conectividad de la región.

“Como transportistas levantamos la mano en revisar la infraestructura carretera”, afirmó.

Paralelo a ello, Andrés Franco, director general del Consejo Mexicano de Comercio Exterior(Comce), dijo tener confianza en que se ejerza el presupuesto “debidamente y responsablemente”.

Opinó que en materia de comercio exterior hay que enfocarse en la logística pues “sin una buena transportación el comercio no puede llegar y no puede ser transportado de punto a punto b, es decir, de México a Estados Unidos, y para hacerlo de manera eficiente y segura, necesitamos infraestructura vial”.

En ese sentido también se pronunció la Cámara de la Industria de la Transformación (Caintra) Nuevo León dijo que es importante considerar en el presupuesto mejoras en la infraestructura física y logística en México, a fin de que se fortalezca la integración al T-MEC y el aprovechamiento de la relocalización de las cadenas de suministro producto del nearshoring.

“Tener en cuenta la modernización y ampliación de carreteras, puertos, aeropuertos; y sistemas de transporte que contribuyan a un tránsito más eficiente y seguro de personas y mercancías dentro y fuera del país”, subrayó.

Para Gabriela Siller, directora de análisis económico de Banco Base “deberían gastar más en infraestructura pero no nada más en la parte de trenes que están ahí, sino energía eléctrica, agua, recarpeteo de carreteras”.

En tanto que Francisco Lelo de Larrea, director de Investigación Económica del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) dijo que lo ideal es que hubiera un gasto y planteamiento responsable del presupuesto.

“Para 2025, si se mantiene el objetivo de reducir el déficit, el gasto tendrá que cumplir con la expectativa de los precriterios de una reducción importante”.

Ven reducción de déficit

Alejandro Saldaña, Economista en Jefe de Ve por Más (B×+), señaló que la presentación del Paquete Económico 2025 será clave por diversas razones, pero especialmente por la elevada incertidumbre por la que atraviesa el país ante los cambios en el marco institucional, así como por el resultado de las elecciones en los Estados Unidos.

“Hacienda se comprometió a reducir el déficit el próximo año, después de que este se elevara significativamente en el presente, con el fin de concluir las obras insignia de la administración pasada, así como en respuesta al ciclo político. En buena parte, de ello depende que la calificación crediticia del país se mantenga dentro del grado de inversión”, dijo.

Agregó que en lo pre criterios estimó que el gasto neto bajaría de $9.1 a $8.7 billones de pesos.

En su opinión, probablemente el gasto no suba los $10 billones de pesos.

Sin embargo, dijo, “sí consideramos que difícilmente se llegue a la meta de $8.7 billones, dado el creciente aumento en el gasto social (por los actuales y nuevos apoyos), un alto costo financiero (las tasas de interés podrían bajar menos a lo previsto por Hacienda), el costo por la organización de las elecciones de jueves y magistrados (no previsto en los Precriterios) y los apoyos a empresas paraestatales (Pemex, CFE)”.

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