Aprende a gestionar tus emociones: ¿Padeces 'enojitis' crónica?
Cuando te enojas, tu organismo experimenta una serie de reacciones físicas y emocionales que pueden afectar tu salud, tanto a corto como a largo plazo
- Por: El Horizonte
- 04 Octubre 2024, 16:26
El enojo es una emoción natural, pero cuando se vuelve crónico o descontrolado, puede tener un impacto significativo en el cuerpo. Cuando estás alterado, tu cuerpo activa el sistema nervioso simpático, desencadenando lo que se conoce como la respuesta de “lucha o huida”.
Esta respuesta es una reacción evolutiva diseñada para protegerte en situaciones de peligro, pero en contextos cotidianos puede resultar perjudicial.
El enojo aumenta la frecuencia cardíaca, se elevan los niveles de adrenalina y cortisol, las hormonas del estrés. Sube la presión arterial, lo que puede forzar el sistema cardiovascular.
Estas respuestas pueden ser útiles en situaciones de emergencia, pero cuando se activan repetidamente debido al estrés o enojo crónico, pueden dañar de forma severa a tu corazón y vasos sanguíneos.
Consecuencias cardiovasculares: El aumento de la frecuencia cardíaca y la presión arterial puede provocar problemas cardíacos.
Diversos estudios sugieren que los episodios frecuentes de enojo aumentan el riesgo de padecer ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
Efectos en el sistema inmunológico: El estrés crónico y la ira descontrolada pueden debilitar el sistema inmunológico. Los altos niveles de cortisol disminuyen la capacidad del cuerpo para combatir infecciones, lo que te hace más vulnerable a enfermedades.
A largo plazo, las personas con ira crónica, pueden experimentar mayores tasas de enfermedad, y tener más dificultades para recuperarse de lesiones o enfermedades. (Con información de Agencias)
¿Cómo manejar la ira?
Respiración profunda: Inhala profundamente por la nariz contando hasta 4, mantén el aire por 4 segundos y luego exhala lentamente por la boca durante 6-8 segundos. Repite este ciclo varias veces hasta sentir que tu cuerpo se relaja.
Cuenta hasta 10 (o más): Es un ejercicio clásico pero muy útil. Contar hasta 10 (o más si es necesario), te da el tiempo para calmarte antes de reaccionar impulsivamente. Cuando sientas que el enojo está tomando el control, empieza a contar lentamente hasta 10 o 20.
Relajación muscular progresiva: Tensa y relaja grupos musculares, te ayudará a liberar la tensión. Empieza por los pies, tensando los músculos durante 5 segundos y luego relajándolos. Sube por las piernas, abdomen, brazos, hasta llegar a la cabeza.
Sal a caminar: Da un paseo de 5-10 minutos al aire libre, preferiblemente en un entorno tranquilo. El ejercicio físico reduce los niveles de cortisol (la hormona del estrés) y aumenta la producción de endorfinas, lo que te ayudará a ver la situación con claridad.
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