'El tiempo que tenemos', una película donde el amor todo lo puede

Una historia de amor que desea superar todos los obstáculos es lo que presenta "El tiempo que tenemos", cinta que conquistó al Festival Internacional de Cine de Toronto, gracias a las actuaciones de sus protagonistas, Florence Pugh y Andrew Garfield.

Escrita por Nick Payne y dirigida por John Crowley, el filme presenta a Tobías y Almunt a lo largo de una década, desde que coinciden inesperadamente en un encuentro que cambiará sus vidas hasta que, con fragmentos de su relación, se revelará la difícil realidad del amor de pareja y los desafíos que se tienen en el camino. 

Crowley dijo que tener a la pareja de actores en la película ha sido una de las mejores decisiones, pues su talento lo muestran en cada escena, haciendo que se vean naturales; de hecho, el director destacó que fue la primera vez que Garfield –americano de nacimiento, pero educado en Inglaterra– actúa con su acento natural británico. 

“Son dos criaturas muy hermosas a la vista, y así se ven en la pantalla, pero no de una manera glamorosa y aspiracional”, dijo Crowley,

“También son británicos que han hecho cine estadounidense y algunos sólo los conocen por eso. Hacer que hablaran con su propio acento permitió que esos roles se acercaran mucho más a ellos”.

Garfield señaló que desde el día uno supo que Florence sería una actriz magnífica para cada escena.

“No sabía si íbamos a trabajar bien juntos. Ninguno de los dos lo sabía, pero para mí, honestamente, superó mis expectativas. Es algo incomparable”, expresó.

Algunos de los retos que enfrentan Almut y Tobias en la trama resultaron familiares para los actores, lo que hizo más sencilla su interpretación: la madre de Garfield murió de cáncer en 2029; mientras que Pugh se convenció que debía raparse realmente, así el director filmó este momento para la escena de la película. 

“Quería que mi cabello se fuera, para sentir estas escenas que he leído en el guion y en las que he pensado”, dijo Pugh, “Me encantó ese día. Fue un día muy poderoso”.

La cinta es presentada en una narrativa no lineal, lo que hace que el espectador pueda “ir recordando” con la pareja esos momentos cruciales en su relación.