Antes de ser policía, García Luna jugó en el América

Antes de ser una figura clave en la seguridad pública y estar en el centro de uno de los mayores escándalos de corrupción que ha visto la México, Genaro García Luna tenía un sueño totalmente distinto: ser un futbolista profesional.

Durante su adolescencia, Genaro García Luna aspiraba a jugar futbol a nivel profesional. Este detalle de subida, que es muy poco conocido, es detallado en el libro. Los millonarios de la guerra. El expediente inédito de García Luna y sus socios, de la periodista Peniley Ramírez.

En 1884, a los 16 años, García Luna entró al club Real Gijón, un equipo amateur que era partícipe de la Liga Española de Futbol Amateur en México. Dicha liga estaba conformada principalmente por jóvenes migrantes españoles, y aunque el nivel en la competencia no era profesional, esta representaba una plataforma para quienes soñaban con triunfar en el futbol.

Pese a sus esfuerzos, García Luna, no pudo concretar su sueño; sin embargo, llegó a formar parte de las reservas del Club América.

Ramón Raya, exjugador y entrenador de la selección mexicana, dijo en su momento a ESPN que fue Ángel Coca González quien se llevó al futuro policía al nido del águila.

Además, lo calificó como un defensa “no era muy bueno, pero sí disciplinado. Era de mucho esfuerzo, era callado porque tenía la situación del lenguaje, pero nunca tuvo problemas con nadie”, aseguró.

Ya en 1987 y con 20 años, se enfrentó a la realidad de un futuro en el que el deporte no sería su profesión y sin el apoyo de sus padres, decidió buscar opciones y esta búsqueda lo condujo al mundo de la seguridad pública.

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