Cocina de ¡extravagancia! El límite del chef es su imaginación

Para la gastronomía, la imaginación del cocinero es el límite; en el menú existen muchos platillos caros y exóticos que se ofrecen en diversas partes del mundo, y destacan no sólo por sus ingredientes raros y exclusivos; sino también por sus métodos de preparación únicos, aquí te compartimos una breve lista de platillos singulares.
 
 
Caviar Almas

Este caviar es uno de los más caros del mundo, proveniente del esturión beluga albino iraní. Un kilo de caviar Almas puede costar hasta $34,500 dólares. Para adquirirlo, tendrás que acudir a una de las selectas tiendas de Caviar House & Prunier, el único lugar del mundo donde está a la venta.

Su elegante diseño lo convierte en un regalo único pues se vende en un recipiente metálico bañado en oro de 24 quilates.
 
Sopa de nido de golondrina

Este platillo se ha consumido tradicionalmente en China durante los últimos 400 años,
se prepara con nidos de aves, que están hechos de la saliva solidificada de las golondrinas. Existe la creencia de que este plato es afrodisíaco, mejora la voz, alivia el asma y mejora el sistema inmunitario.

La sobreexplotación de nidos en las colonias de la salangana, nidoblanco y nidonegro, ha puesto en peligro de extinción a dichas aves.
 
Jamón ibérico de bellota

Proviene de cerdos de raza ibérica y es alimentado de bellotas en su época de engorde, es el jamón más cotizado en las cocinas del mundo y de mayor calidad. La bellota hace que la carne tenga un alto porcentaje de ácido oleico, de lo que resulta ese sabor tan especial.

Se clasifica como el jamón más caro del mundo, una pierna de jamón ibérico puede costar hasta $20,000 pesos. Los cerdos se alimentan como reyes, en ecosistemas de pastizales de por lo menos 2 hectáreas de terreno por animal. 

Oro comestible

Utilizado en postres y bebidas de lujo, el oro comestible es inofensivo para consumir y puede agregar un costo significativo a cualquier platillo. La India es el país que más oro comestible consume, llegando a las 12 toneladas anuales. Es algo tradicional y típico en los pasteles de bodas y menú de celebraciones.

Para que no perjudique la salud del comensal, durante su proceso de elaboración se eliminan los componentes nocivos. Esto hace que el oro comestible apenas tenga más propiedades físicas que el color brillante.