Cuida tu piel de la contaminación

El aumento de las emisiones contaminantes en el medio ambiente expone al organismo a diversos riesgos para la salud, como enfermedades respiratorias y otras afectaciones, entre las que se incluyen daños para el órgano más grande del cuerpo humano: la piel. Debido a que se trata de la capa exterior del sistema inmunológico, ésta absorbe las partículas de humo, polvo o químicos industriales presentes en el ambiente así como los rayos UV del sol.

Las consecuencias de la exposición a la contaminación son variadas, como el deterioro de la piel, el envejecimiento prematuro y la presencia de radicales libres en el organismo. Debido a estos peligros, se recomienda reforzar los aspectos de cuidado personal, alimentación y prevención para evitar los estragos de la contaminación.

Refuerza la limpieza facial

Al finalizar el día, es importante recordar que la piel estuvo expuesta a diversos agentes contaminantes, y en el caso de las mujeres, de productos cosméticos. Por ello, antes de dormir se debe realizar una limpieza profunda en el rostro, la cual debe retirar todos los agentes externos que puedan afectar al cutis, ya sea con agua y jabón o con un producto especializado.

Libera tu piel con la exfoliación

Éste procedimiento consiste en eliminar las células muertas de la piel y estimular la reparación de la capa que está expuesta a la contaminación. Al igual que en la limpieza facial, existen productos que facilitan éste proceso, pero tampoco se debe realizar de forma continua o muy frecuente, ya que puede causar una alteración en los niveles de pH de la piel.

Incluye antioxidantes en tu dieta

Los alimentos ricos en esta sustancia llevan a cabo un papel importante, ya que al ser absorbidos por el pueden frenar a los radicales libres que surgen ante la exposición a la contaminación. Los frutos rojos y secos, así como el té verde, hasta el vino y el chocolate contienen grandes cantidades antioxidantes, por lo que es recomendable añadirlos a la dieta regular.

Utiliza cremas hidratantes

Este producto puede ayudar a mantener la humedad en la piel y a crear una barrera efectiva que protege al cuerpo de los agentes contaminantes en el medio ambiente. Es recomendable elegir una crema acorde a las necesidades de la piel, así como aplicarla todos los días después de la ducha, y si es posible, antes de dormir para aprovechar sus efectos.

Protégete de los rayos del sol

La exposición continua a los rayos UV de la luz solar puede provocar quemaduras en la piel y otras consecuencias entre las que se incluye el cáncer. Por ello, el utilizar lentes oscuros y bloqueadores solares es la forma más efectiva de protección. Elegir un factor de protección adecuado, así como evitar la exposición prolongada a este elemento complementa la prevención contra este factor.

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